¿Flaca o gorda?

Con 1.70 de estatura, 45 kilos y 25 años de edad, Verónica llamó por teléfono desesperada: “Otra vez me volvió a pasar. Acabo de vomitar. Comí una pizza grande, un litro de helado y una hamburguesa…y luego corrí al baño” En pocos minutos E. que colgaba el auricular, después de haber escuchado a su atribulada amiga, estaba a su lado.

 

Verónica ya delgada de por sí, estaba pálida, ojerosa, con los labios secos, las uñas quebradizas y los ojos llorosos. E. tomó la mano de su amiga y la escuchó: había tenido unas de sus crisis. Se acababa de divorciar de un hombre adicto a las drogas y al alcohol y estaba peleando por expatriarlo a pesar de las amenazas de él.

E. si bien no tenía este problema, sabía lo que es una adicción, pues ella misma llevaba años recuperándose de la adicción a las relacione destructivas y entendía perfectamente lo que es una obsesión sutilmente poderosa y fatal, la falta y la necesidad de amor y el gran e inmenso vacío interno que se siente.

Limito decirle a su amiga que estaba enferma. Después la alentó para que buscara ayuda en Comedores Compulsivos Anónimos. Allí estaría con mujeres con experiencias similares a las suyas, obsesionadas por su peso y su comida y encontraría la ayuda y la comprensión que ella obtuvo a su vez en su propio grupo. Entendería mejor su enfermedad y adquiriría las herramientas necesarias para aceptarla, enfrentarla y tratarla.

Verónica tiene problemas de conducta que afectan no sólo su manera de comer, sino también sus emociones y su vida. No puede curarse sola, ni con su voluntad. Los trastornos alimenticios si no se tratan a tiempo, con constancia y dedicación pueden conducir a la muerte.

Anorexia nerviosa

Es un estado de inanición caracterizado por una pérdida excesiva de peso a través de dietas severas, ingestión de laxantes y diuréticos, ayuno y ejercicio compulsivo. Se niegan a mantener su cuerpo con un peso situado dentro de los límites de la normalidad, tienen mucho miedo de aumentar peso o de llegar a ser obesas y están exageradamente preocupadas por su figura. Piensan que están gordas, aunque no lo estén. Por eso, evitan comer e incluso siente repugnancia por los alimentos. En la mayoría de los casos recurre a laxantes y diuréticos y realiza ejercicio intenso con objeto de perder peso, hasta llegar a poner en serio peligro su vida.

La anorexia nerviosa la sufren muchas mujeres. La edad para comenzar a desarrollar este trastorno suele estar entre los 12 y los 25 años, y es más frecuente entre los 12 y los 17.

Entre las consecuencias de la anorexia nervosa la paciente puede sufrir; frecuencia cardiaca; presión arterial baja; osteoporosis; debilidad y pérdida del músculo; estreñimiento; deshidratación severa; desmayos; debilidad general; resequedad de la piel; pérdida de cabellos y uñas y crecimiento de cabello delgado en todo el cuerpo.

Bulimia Nervosa

La persona que sufre de bulimia ingiere grandes cantidades de comida, incluso más de lo que una persona come normalmente, en periodos cortos, para después, deshacerse de la comida y las calorías a través del vómito, abuso de laxantes o ejercicio excesivo.

La bulimia nervosa está ligada al sexo femenino que tiene entre 18 y 20 años, y muchos casos provienen de una anorexia mal cuidada. Quienes tienen bulimia sufren de inflamación y posible ruptura del esófago, debido al vómito constante; estreñimiento; debilidad; caída o manchas de los dientes; causadas por los ácidos estomacales liberados durante el vómito; úlceras y pancreatitis.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado la anorexia y la bulimia como trastornos mentales y del comportamiento.

Comedores Compulsivos

Lo comedores compulsivos comen sin control a pesar de ya estar satisfechos o de ni siquiera tener hambre. Necesitan comer y comer para tapar sentimientos de ira, miedo, ansiedad o angustia entre otros muchos. Quien sufre este trastorno, vive alrededor de las dietas, los vómitos, lo laxantes y los diuréticos.

El peso corporal de un comedor compulsivo puede variar de bajo, normal, sobrepeso moderado y obesidad.

El comedor compulsivo puede incluir alguna combinación de los signos y síntomas de anorexia y bulimia. Pueden sufrir de alta presión arterial; enfermedades del corazón que dan como resultado niveles del colesterol y triglicéridos elevados; diabetes secundaria o enfermedades de la vejiga.

Características de los trastornos de alimentación

• Considera que el aspecto físico tiene mucho valor como medio para conseguir el éxito en cualquier área de su vida.
• Tiene mucho interés por todo lo que está relacionado con el mundo de la moda.
• Hace comentarios frecuentes sobre el peso, las tallas, el aspecto físico y la alimentación.
• Se preocupa en exceso cuando otras personas le hacen algún comentario sobre su aspecto físico.
• Engaña a los demás sobre su alimentación.
• Nerviosismo a las horas de comer.
• Desaparición de comida de la cocina.
• Aparición de comida escondida en el bolso o en diferentes lugares de la habitación.
• Va al lavabo al final de las comidas con demasiada frecuencia.
• Cambios de estado de ánimo o de carácter (depresión, irritabilidad).
• Distanciamiento de los amigos y familiares.
• Evita ir a lugares públicos donde haya comida.

Tratamiento

Los trastornos alimenticios son un mal tridimensional que abarcan el área física, emocional y mental.

Para iniciar la recuperación se presentan varias opciones: psicoterapia individual, (terapia cognitivo-conductual), fármacos administrados por un especialista (los que han resultado más efectivos han sido los antidepresivos) y los grupos anónimos de Comedores Compulsivos (son gratuitos y se trabajan entre iguales).No obstante, lo primero es consultar a un especialista.

Sitios de interés

Comedores Compulsivos Anónimos

• Xicotencatl núm. 86
  Colonia Del Carmen
• Avenida Revolución 172
  Colonia Escandón
• Eugenia 272
  Colinia. Narvarte

Tel. (55) 55 39 55 09

Libro sugerido

• Geneen, Roth, Cuando la comida sustituye al amor, editorial Urano

Bibliografía

• Manual Merck de información médica para el hogar, p.p. 752-756, editorial Océano