Conoce cuidados que pueden ayudar a niñas, niños y bebés a evitar afectaciones visuales

Hay que recordar que una buena atención del aspecto visual puede mejorar la salud, el desempeño escolar, y el desarrollo social y motriz de los más pequeños de la familia ya que 80% de la información que reciben los pequeños llega a través de la vista. El Consejo Optometría México exhorta a las mamás a cuidar la vista de los pequeños a través de la consulta de especialistas certificados. Destaca la importancia de la realización de un tamizaje visual al momento del nacimiento del bebé, la práctica de un examen completo de la vista en la cuarta semana, así como al menos una revisión al año por parte de un Licenciado en Optometría.

En el marco del Día Mundial de la Visión, que se celebra el 13 de octubre, el Consejo Optometría México nos alerta sobre el cuidado que se debe tener a la visión de los niños y bebés. De acuerdo con la Ley General de Salud, a partir de la cuarta semana de nacimiento se debe realizar un examen de la vista a los pequeños para detectar malformaciones oculares, y continuar con revisiones anuales a partir del tercer año de edad. “Justo después del nacimiento, el médico neonatólogo determinará la integridad de las estructuras oculares del pequeño y, posteriormente, dentro de los primeros meses de vida y los años subsecuentes es labor del Licenciado en Optometría realizar una evaluación completa del funcionamiento visual del pequeño”, nos señala Luis Antonio González, Licenciado en Optometría por la UNAM.

Algunas afectaciones visuales que pueden presentar los recién nacidos y que son corregibles si se atienden a tiempo son las siguientes:

• Retinopatía del prematuro. Desarrollo anormal de las venas y arterias que alimentan la capa interna del ojo, lo que puede causar desprendimiento de retina y ceguera infantil.
• Retinoblastoma. Tumor maligno que se puede presentar desde el nacimiento y hasta los 6 años de edad. Esta es una de las principales causas de mortalidad infantil; aunque es curable en el 95% de los casos, siempre y cuando se detecte y atienda oportunamente. Algunos síntomas pueden incluir estrabismo y leucocoria (pupila de color blanco).
• Catarata congénita. Culpable del 14% de los casos de ceguera infantil, se refiere a la opacidad del lente intraocular del ojo, condición que se puede corregir mediante una intervención quirúrgica en la que se coloca un lente artificial que sustituye al opaco.
• Errores de refracción. Son defectos de visión corregibles con anteojos graduados. La Organización Mundial de la Salud (OMS) reporta que el 13% de los niños en edad escolar padece algún problema de refracción no corregido, lo que causa un déficit en su desarrollo intelectual, motriz y social. Si no se trata desde los primeros años de vida el daño puede ser irreversible.

Liliana Pérez, Licenciada en Optometría de la UNAM y parte del Consejo Optometría México, destaca que “el desarrollo visual, pese a ser un proceso gradual, requiere atención pronta y cuidado por parte de especialistas, ya que el 80% de la información que llega a los niños es a través de la vista. Debe estar en las manos de un profesional con cédula y licencia para la práctica de la Optometría”, asegura.

Además la especialista en salud visual alerta que si el menor tiene dificultades para ver el pizarrón, enfado o fatiga para desarrollar sus actividades, ladea la cabeza, se frota los ojos constantemente, o demora mucho tiempo para hacer sus tareas, es posible que tenga algún problema de la vista.

Sitios de interés

• Consejo Optometría México http://www.optometriamexico.org/