¡Prevengamos el suicidio!

En el marco del Día Mundial de la Prevención del Suicidio que se celebró este 10 de septiembre, la Red Mundial de Suicidiólogos, que reúne a médicos psiquiatras, académicos y especialistas de diversas disciplinas, instó a sumar un esfuerzo colectivo para abordar de frente y buscar soluciones al creciente problema del suicidio en México.

“Es urgente que las autoridades gubernamentales, los actores políticos y las instituciones académicas y educativas, participen en la elaboración y diseño de un Plan Nacional de Prevención del Suicidio, que incluya promover la toma de conciencia sobre la importancia del suicidio como causa de muerte”, aseveró Angela Beatriz Martínez González, doctora en Ciencias en Salud Colectiva y presidenta de la Red Mundial de Suicidiólogos en México.

Dijo que es necesario colocar la prevención del suicidio dentro de una estrategia global e implementar un sistema de vigilancia epidemiológica en donde se involucren la familia, la comunidad, el Sector Salud, el educativo, el jurídico, el político con los tres niveles de gobierno, los medios de comunicación, etcétera.

“Necesitamos reforzar políticas y estrategias integrales y multisectoriales referentes a la promoción de la salud mental, la identificación temprana, la prevención, la atención de los trastornos mentales. Establecer acciones eficaces para luchar contra el estigma, difundir información sobre los mitos y prejuicios en torno al suicidio y la salud mental”, puntualizó.

En torno al estigma, la especialista de este organismo que también agrupa a familiares de personas que se quitaron o intentaron quitarse la vida, subrayó que un obstáculo  para la atención adecuada de los trastornos mentales o crisis suicida tiene que ver con las actitudes prejuiciosas y los mitos en torno a la salud mental y al suicidio, dado que se cuestiona y/o se critica a quien busca apoyo especializado.

Entre otros aspectos fundamentales para un enfoque en la prevención del suicidio, la también socióloga Martínez González mencionó que se requiere asignar por lo menos 5% del presupuesto del Sector Salud a la salud mental. Adicionalmente, integrar la perspectiva de género en la salud pública, fortalecer la capacidad para investigar en salud mental pública, garantizar el derecho a la salud, al empleo, a la educación, a la seguridad social a  los grupos socialmente vulnerados.

Los datos de la Red Mundial de Suicidiólogos exponen un escenario desolador en torno al problema:

El suicidio se ha colocado como parte del perfil epidemiológico de México. De 1970 al 2007 el suicido creció 275%, de acuerdo con investigaciones del Instituto Nacional de Psiquiatría. Actualmente el suicidio incrementa su tasa aceleradamente en el grupo de 15 a 29 años, constituyéndose en una de las primeras causas de muerte en este grupo de edad.

Conforme datos del INEGI, para 2010 en el país se registraron 9,902 defunciones en adolescentes de 15 a 19 años. De éstas, el suicidio constituye la tercera causa de muerte (6.2 decesos por cada 100,000 personas).

En 2011 se reportaron 5,718 muertes autoinfligidas; 41.6% tenían entre 15 y 24 años de edad. En ese año en México hubo un suicidio por cada 11,720.43 habitantes. Según el INEGI, de los 5,718 suicidios en 2011, 1,775 fueron de jóvenes de entre 15 a 24 años y 1,275 casos de 25 a 34 años de edad.

Hasta el mes de septiembre del año 2012, a nivel nacional, los suicidios en México llegaron a aproximadamente 5,190 casos; de éstos 4,201 fueron de varones y 989, de mujeres.

Para la Red Mundial de Suicidiólogos, existe un subregistro de las muertes por suicidio cercano al 50 por ciento. No obstante lo más difícil es la tendencia progresiva de jóvenes que han pensado en causarse su propia muerte o que incluso ya idearon cómo suicidarse.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el número de suicidas en las sociedades contemporáneas, ha crecido en un 60% en los últimos 45 años a nivel mundial.

Al año mueren por suicidio alrededor de un millón de personas. Es decir, cada día hay en promedio casi 3,000 personas que ponen fin a su vida.

Adicionalmente, hay que considerar que por cada suicidio se ejecutan de 10 a 25 intentos. Y que entre 10 y 15% de quienes han intentado suicidarse terminan logrando su objetivo y se afectan al menos 6 personas cercanas.

La Red Mundial de Suicidiólogos (RMS) fue fundada en 2009 en Bayamo, Cuba, por el profesor y médico psiquiatra Dr. Sergio Pérez Barrero, con el objetivo de reunir especialistas con experiencia e interesados en atender el suicidio, y también para brindar información sobre este problema en todo el mundo. Los integrantes de la RMS intercambian información científica, impulsan el planteamiento de casos clínicos y contribuyen a su solución mediante consultas a distancia. Buscan realizar cursos online, informar y recibir información acerca de los eventos, seminarios, conferencias y cualquier otra actividad sobre el suicidio y su prevención en los países integrantes de la red. Su sede permanente se encuentra en Bayamo, Cuba. Su sede oficial actual está en Chile.