Una población sana es motor clave del crecimiento socioeconómico; las actuales estrategias no reflejan esa importancia y prioridad, afirma el diputado Vidal Llerenas Morales.
Con el propósito de fortalecer la productividad y competitividad económicas en México, el diputado Vidal Llerenas Morales promueve una iniciativa para impulsar la inversión y el financiamiento sostenido de programas y proyectos que ayuden a mejorar las condiciones de salud individual y social, así como de asistencia sanitaria.
Propuso, ante la Comisión Permanente, adicionar el inciso f, fracción I del Artículo 8 de la Ley para Impulsar el Incremento Sostenido de la Productividad y la Competitividad de la Economía Nacional.
Destacó la estrecha relación entre los problemas de salud, la productividad económica y las condiciones de pobreza de una sociedad, ya que las personas no sanas son más vulnerables a la carencia y a las pérdidas financieras, porque deben absorber los gastos derivados de padecer una enfermedad, como sucede por lo general en México.
Los sectores de la población que enfrentan condiciones de este tipo suelen generar aumento en el gasto público, reducciones en el monto de los ingresos tributarios, ya que los trabajadores se retiran de la fuerza laboral a causa de una enfermedad e incrementan las tasas de morbilidad.
Además, continuó, se registra un mayor número de jubilaciones anticipadas que impactan negativamente la economía de la sociedad por los costos adicionales en los que incurren los sistemas de apoyo social y las familias.
El secretario de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública refirió que en el país los costos sociales asociados a la diabetes tipo 2 ascienden a más de 85 mil millones de pesos al año. De esta cifra, corresponde:
- 73% a gastos por tratamiento médico
- 15% a pérdidas de ingreso por ausentismo laboral
- 12% a merma de ingreso por mortalidad prematura
Esto equivale, dijo, a la mitad del presupuesto para la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad A.C.
Asimismo, subrayó, cada año se pierden más de 400 millones de horas laborables por diabetes asociada al sobrepeso y obesidad, equivalente a 184,851 empleos de tiempo completo, lo que representa el 32% de los empleos formales creados en el 2014.
Por ello consideró necesario generar condiciones de equilibrio, para que el ámbito económico y productivo sea capaz de propiciar condiciones para mejorar la atención de la salud en México.
“El derecho a la salud y la economía juegan en un mismo equipo que tiende a asegurar mayores condiciones y oportunidades de desarrollo no sólo sociales, sino también personales, con el objetivo de elevar los niveles de crecimiento y competitividad social”, afirmó.
Argumentó que la falta de condiciones de salud puede generar repercusiones importantes para la economía, entre las que se encuentra la pérdida de trabajadores y reducción del tiempo y capacidades laborales, provocando una disminución en la productividad y competencia social. Igualmente, dijo, si algún miembro de la familia necesita atención médica, los ahorros se pueden agotar rápidamente.
Bajo este panorama, las personas son vulnerables a caer en pobreza y requerirán ayuda social del gobierno, lo cual tiene un impacto en el desarrollo económico del país, explicó.
En la iniciativa, turnada a la Comisión de Competitividad de la Cámara de Diputados para dictamen, el legislador por la Ciudad de México, argumentó que la mala salud afecta más el gasto sanitario, porque las personas enfermas requieren más días para aliviarse en comparación con las sanas, y durante el tiempo que están en el trabajo, son menos productivas.
Resaltó que la población sana es un motor clave del crecimiento socioeconómico; sin embargo, las actuales estrategias no reflejan la importancia y prioridad que debe asignarse a invertir en la salud de individuos y sociedades.
Sitios de interés
- Instituto Mexicano para la Competitividad http://imco.org.mx/
