¿Achacosa? ¡Madres! La menopausia no nos apaga, nos revela

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Durante décadas, la menopausia fue contada como una historia de pérdida. Una curva descendente donde las mujeres, al llegar a la última menstruación, parecíamos perderlo todo: fertilidad, energía, deseo… e incluso nuestro lugar en el mundo productivo.

En el imaginario colectivo mexicano, esa etapa nos transformaba en la “abuelita de México”: en mecedora, tejiendo chambritas para nietos imaginarios, aunque no nos guste tejer y nuestras hijas ni siquiera estén pensando en tener hijos. Ya no están obligadas a parir para ser mujeres completas.

Como Sara García en Mecánica Nacional, también quiero gritar:

¿Achacosa? ¡Madres!

Porque justo cuando el sistema nos da por acabadas, muchas estamos más lúcidas, más libres y más productivas que nunca.

Hoy, hablar de menopausia no es hablar de un final. Es hablar de autonomía, madurez, deseo propio. De una nueva etapa en la que podemos dejar de cuidar a todos y empezar a ver por nosotras. Es dejar de obedecer al mandato de la juventud eterna y comenzar a escribir nuestros propios ciclos.

Y aunque no hay suficientes estudios que midan nuestra productividad en esta etapa, sí hay señales poderosas de que muchas mujeres encontramos aquí un nuevo impulso, una claridad renovada y una manera distinta, pero no menor de habitarnos.

El informe Women in the Workplace 2024, realizado por McKinsey & Company en colaboración con Leanin.org, analiza una década de datos de más de mil empresas estadounidenses. Su hallazgo es contundente: la representación de mujeres en puestos de alta dirección (el llamado C-suite) pasó del 17 % en 2015 al 29 % en 2024. Es el mayor crecimiento registrado en todos los niveles jerárquicos.

Sin embargo, al ritmo actual, tomaría 22 años alcanzar la paridad para mujeres blancas y 48 años para mujeres racializadas lleguen a ese mismo punto.

Casi medio siglo más para ocupar formalmente los espacios que muchas ya sostienen desde la práctica, pero no desde el reconocimiento.

No se trata de probar que somos más productivas. Se trata de no permitir que nos den por terminadas.

Muchas mujeres descubrimos en esta etapa una voz que no pide permiso, un cuerpo que ya no calla lo que desea ni lo que le duele, una presencia que no busca gustar, sino habitarse.

Todo eso que habitamos por dentro empieza a escribirse en el afuera. Se nota en las decisiones que tomamos con firmeza, en los caminos nuevos que abrimos, en los proyectos que iniciamos con pasión.

No siempre hay premios o reconocimiento, pero sí huella.

Ahí están:

Ruth Bader Ginsbur, nombrada jueza de la Corte Suprema de Estados Unidos a los 60 años, se convirtió en un ícono global de la justicia hasta su muerte a los 87 años.  Desde la Corte, respaldó con claridad causas clave para la igualdad de género, el acceso a la justicia y los derechos reproductivos. Sus votos y disensos contribuyeron a moldear una jurisprudencia más equitativa.

Toni Morrison, recibió el Premio Nobel de Literatura a los 62 años, escribió sobre la experiencia femenina negra con una voz propia, poderosa y poética. Dio dignidad, centralidad y profundidad literaria a historias que habían sido silenciadas durante siglos. Siguió escribiendo y enseñando hasta los útlimos años de su vida.

Isabel Coixet, directora de cine, a los 63 años sigue filmando sobre la memoria, el deseo y la identidad femenina, sin rendirse al rito de la comercialización. Su obra ha visibilizado la complejidad emocional de las mujeres, alejándose de estereotipos y abriendo espacio a narrativas íntimas en el cine europeo contemporáneo.

No necesitamos ovular para crear. Lo que duele no es envejecer, es envejecer invisibles.

Pero ya no estamos dispuestas a desaparecer. Esta etapa con sus bochornos, olvidos y desvelos, también es más lúcida. Muchas descubrimos que el cuerpo ya no sangra, pero ahora habla más claro. Que el deseo no muere, se transforma. Que el tiempo ya no es enemigo, sino aliado.

La menopausia no nos apaga, nos revela

Y si alguna duda queda, ahí está Sara García para recordarnos.

¿Achacosa? ¡Madres!

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