En el marco del Día Mundial contra la Tuberculosis, que tiene lugar el 24 de marzo, la Organización Panamericana de la Salud/ Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) convoca a trabajar unidos con el lema “No dejar a nadie atrás. Unidos para poner fin a la tuberculosis”.
[media-credit name=»OMS | OPS» align=»aligncenter» width=»393″][/media-credit]La región de las Américas ha reducido considerablemente los nuevos casos y las muertes por tuberculosis (TB) en los últimos 25 años. Sin embargo, se estima que casi 270 mil personas contrajeron la enfermedad en 2015 y casi 50 mil no saben que la tienen.
«La tuberculosis es un problema de salud asociado a la pobreza y las malas condiciones de vida que, sumado a las dificultades de acceso a los servicios de salud, requiere ser abordado por toda la sociedad«, afirmó el director del Departamento de Enfermedades Transmisibles y Análisis de la Salud de la OPS/OMS, Marcos Espinal.
La población en mayor riesgo en las Américas son las personas con VIH, aquellos en situación de calle, habitantes de barrios marginales de las ciudades, privados de la libertad y personas con problemas de adicción, poblaciones que generalmente tienen acceso limitado a la atención de salud y, si la tienen, no siempre son diagnosticadas oportunamente de tuberculosis cuando la padecen.
Familia de barrios marginales
Este año, la campaña de la OPS/OMS, que lleva el lema “No dejar a nadie atrás. Unidos para poner fin a la tuberculosis”, busca promover el acceso a una atención de salud de calidad, algo de lo que carece más de un tercio de las personas con TB a nivel mundial.
Asimismo, apunta a fomentar la acción multisectorial para prevenir nuevos casos mediante el combate a la pobreza –uno de sus determinantes-; mejorar el diagnóstico, el tratamiento y la curación; impulsar la investigación y la innovación, y poner fin al estigma y a la discriminación, que pueden ser barreras para el acceso a la atención.
Terminar con la TB es posible
Con el 2,6% del total, las Américas registra el menor porcentaje de nuevos casos de TB del mundo, frente al 61% de Asia y el 26% de África. La mayor carga de la enfermedad (88%) se concentra en 10 países de la región. Los casos nuevos de tuberculosis vienen disminuyendo un 1.8% anualmente y las muertes, un 2.9%, gracias a las medidas adoptadas por los países de la región alineadas con la estrategia mundial de OMS y el Plan de Acción de Prevención y Control de la TB de la OPS. Sin embargo, es necesario acelerar el paso para terminar con la enfermedad para 2030, nueva meta relacionada con la salud incluida en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
«Acabar con la tuberculosis es posible”, sostuvo la asesora regional de la OPS/OMS en tuberculosis, Mirtha Del Granado, y recomendó enfocar los esfuerzos en los grupos de mayor riesgo, abordar los factores sociales que influyen sobre la salud de la población, y ampliar el acceso al diagnóstico y al tratamiento de calidad para todos los que lo necesitan.
Los nuevos desafíos
A pesar de que se trata de una afección curable y que se puede prevenir, se estima que 25 mil personas murieron de tuberculosis en las Américas en 2015. Las personas inmunodeprimidas, por ejemplo las que padecen VIH, desnutrición o diabetes, y los consumidores de tabaco, entre otros, corren un riesgo mucho mayor de enfermar. 32 mil personas con VIH desarrollaron TB en 2015 en la región.
Entre los nuevos retos que enfrenta el combate contra esta enfermedad, figura la resistencia a los medicamentos antituberculosos corrientes que llevan décadas utilizándose. En 2015, se estimaron en las Américas 7,700 casos de tuberculosis multirresistente, el 59% fueron diagnosticados y solo el 74.8% de estos enfermos reciben actualmente un tratamiento eficaz.
Sitios de interés
- Día Mundial de la Tuberculosis http://www2.paho.org/hq/index.php?option=com_content&view=article&id=12932&Itemid=42255&lang=es