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La Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció como nuevo estándar internacional que toda mujer con sospecha de cáncer de mama reciba un diagnóstico integral en un máximo de dos meses, con el objetivo de reducir la mortalidad por esta enfermedad que cada año causa más de 8 mil muertes en México y afecta a 31 mil mujeres con nuevos diagnósticos.
El indicador forma parte del Índice de Calidad de la Atención del Cáncer de Mama (BCCQI, por sus siglas en inglés), una herramienta diseñada para transformar la atención sanitaria desde la detección temprana hasta el seguimiento integral, fortaleciendo la capacidad diagnóstica y garantizando la continuidad en el tratamiento.
El objetivo es que al menos 60 % de los casos invasivos sean identificados en etapas I o II, cuando las posibilidades de curación son mayores.

“La meta de dos meses representa un cambio estructural que exige reorganizar los servicios de salud y mejorar la coordinación entre niveles de atención”, explicó el Dr. Ramsés Hernández, director médico de AstraZeneca México, quien respaldó la estrategia de la OMS por su potencial para salvar vidas y reducir la carga económica y emocional asociada al diagnóstico tardío.
Hacia una atención oportuna y equitativa
El BCCQI propone una estrategia integral de cuatro pilares:
- Detección temprana, para diagnosticar al menos 60 % de los casos en etapas iniciales.
 - Diagnóstico oportuno, garantizando servicios completos en menos de dos meses.
 - Manejo integral, con más del 80 % de pacientes completando su tratamiento.
 - Sistemas resilientes, con infraestructura y recursos sostenibles.
 
“Se trata de sumar esfuerzos entre instituciones, fundaciones y el sector público para identificar el cáncer de mama cada vez en etapas más tempranas”, subrayó Hernández. “Mientras antes se inicie el tratamiento, mejores son las probabilidades de supervivencia y calidad de vida”, añadió.
Más allá de la autoexploración: innovación y medicina de precisión
A diferencia de campañas centradas exclusivamente en la autoexploración, el nuevo modelo enfatiza revisiones clínicas periódicas, mamografías, ecografías y pruebas genéticas, como parte de una estrategia integral que permita detectar la enfermedad antes de que avance.
Según la OMS, la detección temprana podría reducir la mortalidad hasta en un 30 %.
Desde la perspectiva de la investigación biomédica, la innovación también tiene un papel esencial para cumplir los estándares fijados por la OMS. AstraZeneca México destacó que las terapias dirigidas y la medicina de precisión están cambiando el curso clínico del cáncer de mama al actuar directamente sobre el tumor.
Con la implementación de este modelo, México podría alinearse con las metas de la OMS para 2030, que buscan reducir en 25 % la mortalidad prematura por enfermedades no transmisibles, mediante el acceso equitativo, la innovación tecnológica y la atención oportuna.





