Las integrantes del Grupo de Trabajo del Mecanismo de Seguimiento al Cumplimiento de la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW por sus siglas en inglés) en materia legislativa, se reunieron con especialistas en comunicación digital a fin de analizar la violencia simbólica en los medios de información, quienes manifestaron que ahí prevalece la desigualdad de género.
La diputada Beatriz Rojas Martínez, destacó que la violencia simbólica no está tipificada en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, pero agrede a las mexicanas por medio de estereotipos, mensajes, valores o ideas que naturalizan, producen y transmiten dominación, desigualdad, discriminación, subordinación y violencia contra las mujeres y niñas.
Precisó que este tipo de violencia afecta de manera sutil y poco perceptible, pero estanca el desarrollo pleno de las mujeres y “al formar parte de nuestras prácticas cotidianas, cultura y tradiciones, es ejercida de manera inconsciente, natural y normal”, de ahí que sea difícil de identificar y reconocer.
En tanto, dijo, la violencia mediática se da en símbolos, mensajes, ideas estereotipadas, a través de medios de comunicación masivos y electrónicos, que de manera directa o indirecta caen en humillación, explotación, degradación, discriminación y violencia contra las mujeres poniendo en peligro su integridad.
Se expresa también en mensajes, ideas, símbolos e imágenes que naturalizan la relación de inferioridad entre mujeres y hombres legitimando la desigualdad y la construcción de patrones sociales, culturales, políticos y económicos estereotipados que están siendo muy invisibilizados ante la sociedad.
Por ello, destacó la importancia de cumplir con los tratados internacionales que ha firmado y ratificado México. Recordó que dentro del informe de la CEDAW se estableció la obligación de legislar y hacer visibles los tipos y modos de violencia adicionando las de tipo simbólica y mediática a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
Se deben atender todas las violencias
La diputada Rocío del Pilar Villarauz Martínez informó que impulsa una iniciativa para evitar la publicidad sexista, la cual está en revisión en la Comisión de Radio y Televisión. “Lo que queremos es atender todas las violencias que son invisibilizadas y que sólo reafirman la cultura patriarcal”.
Su correligionaria, diputada María Eugenia Hernández Pérez, consideró que los medios de información, con sus estereotipos, a diario contribuyen a reforzar las normas sociales que dictan:
- Cómo debe ser la mujer en su comportamiento
- Apariencia física
- e incluso estado psicológico
Lo que atenta claramente al libre desarrollo de su persona y derechos.
La diputada Mildred Concepción Ávila Vera destacó la importancia de cumplir con los acuerdos que firmó México respecto de este tema. Consideró que el trabajo de las expertas es un material fundamental para sustentar el debate con herramientas y sensibilizar a la sociedad.
La diputada Laura Martínez González señaló que la violencia mediática y simbólica se debería analizar desde el kínder -educación preescolar- y las escuelas, así como en los pueblos indígenas porque ahí también se promueven los concursos para elegir a la mujer más bella del ejido.
Este tipo de violencia origina formas de opresión
La coordinadora de la Unidad para la Igualdad de Género de la Cámara de Diputados, Beatriz Santamaría Monjaraz, indicó que la violencia simbólica tiene su origen en el sistema estructural, patriarcal y hegemónico que ha generado distintas formas de opresión hacia las mujeres, de ahí la importancia de su análisis.
Detalló que las aportaciones de la academia han permitido a las legisladoras abonar en el ámbito teórico y modificar las categorías de análisis e investigación, a fin de que los ordenamientos jurídicos se orienten a la eliminación de cualquier tipo de discriminación o violencia en contra de las mujeres.
Anunció que el próximo 25 de julio la Cámara de Diputados tendrá que enviar el informe de medio término respecto a los avances de las recomendaciones realizadas por la CEDAW.
La violencia simbólica afecta la autoestima
Cyntia Cerón Hernández, profesora e investigadora en Comunicación Digital en la Universidad Intercontinental, explicó que la violencia simbólica hacia las mujeres no es evidente; sin embargo, afecta la autoestima e incide en la desvalorización del cuerpo femenino. Apuntó el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México reportó que tan sólo en el 2017 se difundieron cerca de 20 mil mensajes de odio por razones de género en las redes sociales.
Destacó que en el país prevalece la desigualdad de género en la industria mediática donde predomina la participación de hombres desde la propiedad, la dirección, el nivel profesional, técnicos y puestos de toma de decisiones, toda vez que las mujeres tan sólo constituyen el 1% de la titularidad en las concesiones televisivas y 13% en las radiofónicas.
Planteó que es necesario incidir en la industria mediática, el campo profesional y el educativo respecto de la importancia de la perspectiva de género, además de modificar la construcción de contenidos narrativos para que se dejen de lado los estereotipos de lo femenino y lo masculino.
Violencia simbólica, sustento ideológico para otras agresiones
Thelma Elena Pérez Álvarez, investigadora en comunicación digital en la Universidad Intercontinental, resaltó la importancia de analizar la tipificación de la violencia simbólica porque es el sustento ideológico para las demás agresiones e interviene en la construcción de la estructura jerárquica de la sociedad.
La violencia mediática, dijo, es estructural y la base ideológica de un sistema patriarcal que permite la manifestación de otras violencias contra las mujeres. “En nuestra cultura y sociedad existe una legitimación de la violencia simbólica” que incide en su normalización porque está en el imaginario social y los medios de comunicación masiva cooperan con esa legitimación y normalización, a través de la difusión.
Refirió que una investigación específica cita que la violencia simbólica en la publicidad televisiva es un eje que colabora con la normalización de desigualdades redistributivas y representativas hacia las mujeres; se muestran y promueven modelos hegemónicos de feminidad y masculinidad y se centra la atención en la apariencia física[.]