Al encabezar la presentación del estudio “Construir un México Inclusivo. Política y Buena Gobernanza para la Igualdad de Género”, el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong destacó que la igualdad sustantiva exige nuevas formas de convivencia, basadas en el respeto y la inclusión.
En el salón Revolución de la Secretaría de Gobernación, informó que México se ubica en segundo lugar de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en participación femenina en los parlamentos nacionales, tan solo superado por Suecia. El 42% de la Cámara de Diputados está conformada por mujeres, recalcó.Por ello, dijo, es fundamental avanzar en la esfera pública, especialmente a escala municipal. Señaló que para lograrlo se requiere trabajar tanto en reformas legales como en políticas concretas en favor de la igualdad.
Las mexicanas cuentan con apoyo, orientación, créditos, proyectos productivos y capacitación, para que puedan lograr una mayor independencia. Además, subrayó, es importante que participen, se sientan respetadas, seguras y valoradas en sus ambientes de trabajo y sus hogares.
“El objetivo es terminar con las condiciones de dependencia, discriminación y subordinación que muchas mujeres padecen, poniendo fin a los ciclos de violencia“, aclaró el Secretario Osorio Chong.
El secretario general de la OCDE, José Ángel Gurría Treviño, consideró que México alcanzará sus objetivos de desarrollo si las mujeres participan plenamente en la economía, la sociedad y la política. Añadió que es necesario revisar las legislaciones, los planes y programas en la materia para lograr una gobernabilidad efectiva.
Indicó que es necesario atender de manera prioritaria el tema educativo, medio para crear conciencia, combatir estereotipos y para que las jóvenes mexicanas cuenten con herramientas que les permitan elegir una carrera.
Comentó que actualmente el 47% de las mujeres en edad de trabajar, lo hacen; más de la mitad de ese porcentaje tiene un empleo informal con poca o nula seguridad social, lo que afecta la productividad nacional, aumenta la inseguridad financiera y acentúa la pobreza.
La presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES), Lorena Cruz Sánchez, señaló que este estudio es resultado de una intensa colaboración entre la OCDE y el Instituto, y su objetivo es conocer avances e identificar acciones para derribar barreras que impiden a las mujeres ejercer sus derechos y participar plenamente en la vida económica y en la toma de decisiones.
“Frente al complejo escenario económico mundial, hoy más que nunca la inclusión de las mujeres en la fuerza laboral en condiciones de igualdad es clave para el bienestar de las familias y sobre todo para el crecimiento económico de México”, subrayó.
Cruz Sánchez agregó que este estudio es un nuevo instrumento que se aprovechará para dar pasos estratégicos e incorporar la perspectiva de igualdad entre mujeres y hombres en las políticas sectoriales y revertir condiciones de desigualdad para las niñas y mujeres del país.
Crucial contribución de las mujeres para el desarrollo económico y social de México
De acuerdo a la información en el “Estudio OCDE sobre Políticas de Género en México“, las mujeres son el recurso menos valorado en México: sólo 47% de las mujeres mexicanas en edad de trabajar forma parte de la fuerza laboral, muy por debajo del promedio OCDE de 67%.El estudio realizado junto con INMUJERES señala que las mujeres tienen un vínculo directo no sólo con la competitividad, sino también con la productividad incluyente del país; la cual es necesario reconocer y potenciar. Por lo que se necesitan políticas más eficaces que combatan la desigualdad y permitan el empoderamiento económico y laboral de las mujeres dentro de un contexto de equidad de género.
Las jóvenes mexicanas enfrentan desafíos especialmente graves como la deserción escolar y el embarazo adolescente; el cual representa en México la tasa más alta – 74 nacimientos por cada mil mujeres entre 15 y 19 años – en comparación con un promedio de 15 nacimientos en países de la OCDE. Esto orilla a las mujeres mexicanas a formar parte del 35% de personas que ni estudian ni trabajan (NINIs) la segunda tasa más alta de la OCDE después de Turquía.
Por ello, se ha hecho un llamado para que el sistema educativo evite reproducir los estereotipos de género en los libros de texto, se capaciten a los docentes para que se eliminen los sesgos de género y se ayude a las mujeres jóvenes en identificar nuevos modelos a seguir en su desarrollo futuro; asimismo en el reporte se resalta la necesidad de generar una mayor confianza en las niñas animándolas a que continúen su educación en Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM).
La desigualdad de género tiene un alto costo económico. México sólo podrá alcanzar sus objetivos de desarrollo si las mujeres participan plenamente en la economía, la sociedad y la política. A pesar de estos retos, el gobierno mexicano ha tomado medidas importantes y ha logrado avances en este materia como el haber instalado la Primera Sesión del Sistema Nacional de Igualdad entre Hombres y Mujeres en presencia del Presidente de la República.
Entre las recomendaciones que propone el estudio, está la de desarrollar un sistema de gobernabilidad efectivo e incluyente; impulsar los esfuerzos en el ámbito educativo; crear conciencia sobre la violencia de género; tomar medidas que faciliten el balance entre trabajo y vida personal tanto en el sector público como en el privado, así como reducir la informalidad en el empleo femenino.
La igualdad de género es buena no sólo para las mujeres, sino también para los hombres y las familias. La implementación efectiva de las medidas mencionadas, en todas las regiones de México mejorara el bienestar de todos los mexicanos.
Referencias
- OCDE (2017), Building an Inclusive Mexico, Policies and Good Governance for Gender Equality, OECD Publishing, París; Publicado el 10 de enero 2017; ISBN 978-92-64-26548-6; DOI:10.1787/9789264265493-en; Disponible en el URL http://www.oecd.org/mexico/building-an-inclusive-mexico-9789264265493-en.htm