Un estudio realizado por el Instituto Karolinska, de Estocolmo, Suecia, vincula a la depresión perinatal con una mayor propensión de enfermedades cardiovasculares.
La depresión perinatal es un trastorno del estado de ánimo que ocurre durante el embarazo y después del parto, según el Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos.
Sin bien los síntomas van de moderados a graves, existen casos excepcionales en los que se llega a poner en peligro la salud y el bienestar de la madre y el bebé. La mayoría de los cuadros de depresión perinatal inician entre las cuatro y ocho semanas posteriores al parto.
1 de cada 7 mujeres experimenta depresión perinatal
Los principales síntomas son sentimientos de tristeza, ansiedad y fatiga extrema que impactan directamente en las actividades diarias, como el cuidado de sí misma o de los demás. Además, se estima que una de cada siete mujeres experimenta depresión perinatal.
No es tristeza posparto
Cerca del 85% de las madres primerizas experimentan lo que comúnmente se denomina “tristeza posparto” que no es lo mismo que la depresión perinatal. La “tristeza posparto” es una afección que dura poco tiempo, no afecta la vida diaria y no necesita atención médica, según señala la Universidad Johns Hopkins.
El período perinatal comprende desde la semana 22 de gestación (154 días) hasta el término de las primeras 4 semanas de vida neonatal (28 días).
Síntomas
Entre los síntomas de esta condición emocional están el llanto sin motivo, irritabilidad, inquietud y ansiedad. Estos cambios emocionales duran una o dos semanas y por lo general se supera en el proceso de adaptarse a la nueva vida.
En este sentido, la depresión perinatal se diferencia de la “tristeza posparto” en que es emocional y físicamente debilitante y de larga duración. Afecta directamente las actividades de la vida diaria, por lo que es muy importante detectar los síntomas a tiempo e iniciar un tratamiento adecuado por el bien de la madre, el bebé y la familia.
Depresión perinatal y riesgos cardíacos
Un estudio realizado por el Instituto Karolinska, de Estocolmo, publicado en la revista European Heart Journal reveló que la depresión perinatal se vincula con el aumento de enfermedades cardiovasculares.
Dicho estudio habla de que al día de hoy hay evidencias que asocian factores/riesgos reproductivos relacionados con una enfermedad cardiovascular en mujeres.
El seguimiento a más de 55 mil mujeres diagnosticadas con depresión perinatal y otras 500 mil más no afectadas, arrojó como resultado que el 3.7% de las mujeres que no presentaron síntomas de depresión desarrollaron una enfermedad cardiovascular, mientras que el 36% de las mujeres con depresión perinatal sí la desarrollaron a lo largo de 20 años de seguimiento.
En este sentido, el estudio dirigido por la Dra. Emma Brän, concluye que las mujeres que presentan depresión perinatal tienen un mayor riesgo de contraer alguna enfermedad cardiovascular en la adultez media.