¿Alguna vez has tenido dolor en el talón? En esta modernidad llena de carreras para llegar a tiempo, el caminar, correr y subir escaleras sin cuidado puede ser un factor de riesgo para desarrollar fascitis plantar. Esta afección es una de las causas más comunes de dolor de talón.
Por lo general, los síntomas de la fascitis plantar se manifiestan por las mañanas como un dolor punzante en el talón que sentirás luego de dar los primeros pasos al levantarte de la cama. Casi siempre el dolor disminuye, sin embargo, puede aparecer después de que estés de pie por mucho tiempo o después de estar sentado si te levantas abruptamente.
¿Qué causa la fascitis plantar?
Esta molestia surge cuando se inflama la fascia plantar; es un tejido grueso que atraviesa la planta del pie por debajo de la piel y conecta el hueso del talón con los dedos de los pies. Además, sostiene el arco del pie y su principal función es absorber el impacto al caminar.
En este sentido, la constante tensión y el estrés de la fascia puede provocar pequeños desgarros. Por su parte, los estiramientos, desgarros constantes y alto impacto al caminar irritan o inflaman la fascia, lo que provoca el dolor.
Sin embargo, hay que mencionar que la fascitis plantar no es una patología que se puede enmarcar dentro de una actividad física concreta. Es importante destacar que en muchos casos el origen del dolor es incierto pues su campo de acción se extiende a toda la actividad que obliga a trabajar la fase de apoyo e impulso con el pie.
Puedes presentar fascitis plantar si:
- Tienes pie plano o problemas con el arco del pie.
- Corres largas distancias cuesta abajo o sobre superficies desiguales.
- Tienes sobrepeso o tu peso aumenta de manera repentina.
- Usas Zapatos con soporte de arco deficiente o suelas blandas.
Esta es una de las dolencias ortopédicas más comunes del pie y se presenta tanto en hombres como en mujeres. Sin embargo, cabe destacar que la presencia de la fascitis plantar es mayor en mujeres que en hombres.
En ese sentido la primera recomendación es ir a tu médico si presentas alguno de los síntomas que te mencionamos. Entre los exámenes más recomendados para detectar la fascitis plantar está el examen de pie plano, rigidez o tensión del tendón de Aquiles y rigidez o tensión en el arco de la parte inferior del pie.
Las radiografías también pueden ser una herramienta clave para detectar cualquier anomalía.
Tratamiento para la fascitis plantar
Al ser un padecimiento que en algunos casos desaparece solo y no se tiene claridad en cuanto a su causa, los tratamientos son relativamente seguros y sencillos. Por lo general se recomienda tomar paracetamol o ibuprofeno para reducir el dolor y la inflamación.
La fisioterapia enfocada en ejercicios de estiramiento del talón y el pie. Usar férulas nocturnas con la intención de tener el pie estirado. Además, es importante descansar lo más que se pueda durante la semana posterior a los síntomas y usar calzado con buen soporte y amortiguación.