El cuerpo humano tiene diversos mecanismos para enfrentar a los microorganismos que provocan enfermedades, uno de ellos es la producción de anticuerpos específicos que neutralizan y ayudan a eliminar a un virus o una bacteria. Esta respuesta suele darse al inicio de una infección, pero no siempre es efectiva.
Se ha documentado que para los coronavirus HCoV-229E y HCoV-OC4, que ocasionan resfriado común en los humanos, se generan anticuerpos neutralizantes; los cuales otorgan protección significativa contra la infección. De ahí la relevancia de tener un sistema eficiente para identificar si sucede lo mismo con el SARS-CoV-2.
Un grupo de investigación del Cinvestav, encabezado por Juan Ernesto Ludert León y José Segovia Vila, desarrolla un ensayo que permitirá medir los niveles de anticuerpos neutralizantes, presentes en el suero de pacientes infectados con el nuevo coronavirus, y también evaluar el potencial antiviral de algunos fármacos.
Lo anterior servirá para obtener más información acerca de la respuesta inmune ante este virus e identificar compuestos que a futuro puedan ayudar en el tratamiento del COVID-19.
Este proyecto se realizará con el financiamiento del Conacyt como parte de la “Convocatoria de Apoyo para Proyectos de Investigación Científica, Desarrollo Tecnológico e Innovación en Salud ante la contingencia por COVID-19”.
Los ensayos para cuantificar los niveles de anticuerpos neutralizantes, generalmente se realizan in vitro y emplean al patógeno causante de la enfermedad. Sin embargo, el nuevo coronavirus es altamente infeccioso y resulta peligroso manipularlo o utilizarlo en pruebas experimentales.
Una alternativa es modificar un virus, en específico un lentivirus, para que no se pueda reproducir (no sea infeccioso); pero genere la proteína espiga o S del SARS-CoV-2. Esto a través de la cual logra unirse y entrar a las células humanas y exprese también una proteína reportera (fluorescente o bioluminiscente).
Cabe destacar que estos virus modificados, llamados pseudovirus, son un sistema seguro y se han usado en el estudio de otros patógenos peligrosos como el del Ébola.
“Vamos a construir pseudovirus que producirán la proteína espiga en su superficie y con ello tendrán la misma capacidad del SARS-CoV-2 para entrar a las células; pero no van a poder reproducirse ni infectar”, explicó José Segovia, del Departamento de Fisiología, Biofísica y Neurociencias.
El ensayo de laboratorio consistirá en conformar una mezcla con los sueros de pacientes y los pseudovirus, para posteriormente añadirla a cultivos de células humanas.
Si los sueros carecen de anticuerpos neutralizantes, los virus modificados se unirán y entrarán a las células, dando como resultado una señal lumínica. Por el contrario, de contener este tipo de anticuerpos, la proteína espiga se verá bloqueada; al igual que la entrada de los pseudovirus a las células y la fluorescencia o bioluminiscencia disminuirá.
Mediante estos ensayos se tendría una idea de los niveles de anticuerpos neutralizantes presentes en el suero de cada paciente; y de qué tan específicos son ante el nuevo coronavirus.
Otra parte del proyecto se enfocará en evaluar el potencial antiviral de algunos fármacos; es decir, identificar compuestos que puedan impedir la entrada de los pseudovirus a las células.
Para estas pruebas se agregarán los pseudovirus (que expresan las proteínas: espiga y reportera) a células humanas tratadas previamente con los fármacos. Si los compuestos tienen actividad antiviral no se producirá la señal lumínica, señaló Juan E. Ludert, del Departamento de Infectómica y Patogénesis Molecular.
Este segundo ensayo servirá para identificar fármacos que más adelante podrían ser probados en modelos animales y de esta manera comprobar los resultados obtenidos in vitro; además de dilucidar los mecanismos de acción involucrados y los posibles efectos colaterales.
Por el momento, los especialistas del Cinvestav están en el proceso de construcción de los pseudovirus, necesarios para llevar a cabo el estudio. Y una vez que estén listos, los pondrán a disposición de otros grupos de investigación que los requieran a fin de realizar pruebas experimentales relacionadas con el SARS-CoV-2[.]