“Hicimos hincapié en la capacitación, previo al ingreso laboral. También durante la estancia del personal de enfermería, se está supervisando el uso correcto del equipo de protección personal. Y es un personal joven que tiene mucha disposición para el aprendizaje. Tenemos una tasa de infección muy baja, en comparación con otros hospitales, de lo que es el sector salud. Tenemos una tasa aproximada como de 7% de contagios”, informa la maestra María Isabel López López, enfermera con 40 años de experiencia, comisionada como Jefa de enfermeras en la Unidad Médica Temporal Autódromo.
Comenta que los trabajadores sanitarios de México se ubican entre los más afectados a nivel mundial en la lucha contra la pandemia y muestran la urgencia de establecer medidas para frenar el impacto de las infecciones asociadas a la atención a la salud (IAAS), o infecciones nosocomiales.
En particular en el caso de la pandemia por COVID-19, son las enfermeras y enfermeros el grupo más vulnerable, pues representan más de 40% de los contagios del sector salud.
Además de la capacitación se cuenta con un sistema de manejo de desechos humanos con insumos y utensilios de un solo uso, tales como cómodos, urinales y palanganas desechables, elaborados con pulpa de papel.
“El sistema de eliminación de excretas que tenemos en el Autódromo, es de muchos beneficios para la protección del personal de salud, porque no tienen exposición a fluidos. En el momento en que se recolecta una evacuación u orina, contamos con un gelatinizante. Y las excretas, junto con el cómodo u orinal, se desechan en un macerador” (que tiene salida al drenaje), explica la maestra López López.
Para concluir la Jefa de enfermeras es optimista: “Creo que después de esta experiencia, ya tenemos en varios lugares dentro del instituto, estos dispositivos. Esperamos contar con ellos en todas las unidades hospitalarias, porque reduciría mucho el riesgo de las infecciones nosocomiales”.
Con información proporcionada por la iniciativa Hospitales sin Infecciones[.]