La diputada María de los Ángeles Ayala Díaz propuso exhortar a las secretarías de Economía y de Medio Ambiente y Recursos Naturales, así como a la Procuraduría Federal del Consumidor difundan una cultura responsable del consumo, reutilización de artículos, separación de basura, producción de insumos amigables con el ambiente, así como el reciclaje y tratamiento de residuos sólidos.
En un punto de acuerdo que analiza la Comisión de Medio Ambiente, Sustentabilidad, Cambio Climático y Recursos Naturales, señaló que el consumo excesivo de artículos empacados produce más de 100 millones de toneladas diarias de desperdicios que se van a depósitos colapsados o a tiraderos clandestinos.Indicó que una gran cantidad de estos residuos son plásticos, como botellas, empaques y bolsas, que tardan hasta 400 años en degradarse.
Ayala Díaz destacó que la mayoría de la basura generada en el país se encuentra en tiraderos a cielo abierto, “crean focos de insalubridad e higiene, propaga la fauna nociva, gases tóxicos, y los fluidos penetran en el subsuelo contaminando tierras y mantos acuíferos”.
Se ha generalizado en el país, el exceso de basura, la deficiente recolección y el que algunos depósitos están a su máxima capacidad y otros a punto de colapsar. Por ello, gran cantidad de municipios enfrentan muchas complicaciones al buscar nuevos destinos o tecnologías para el tratamiento de los desperdicios.
Consideró que “ciudadanos y gobiernos estamos obligados a fomentar hábitos de consumo sustentables, así como la cultura de reutilización y retorno de los productos, separación y manejo de desperdicios a nivel nacional”.
Expuso que el aumento en la generación de residuos sólidos urbanos es resultado de factores, como:
- crecimiento urbano
- desarrollo industrial
- modificaciones tecnológicas
- cambio en los patrones de consumo de la población
En México, como en muchos otros países, el crecimiento de la generación marcha a la par del gasto del consumo final privado y el Producto Interno Bruto (PIB) nacional. Tan sólo, entre 2003 y 2015, el PIB y la generación de residuos crecieron prácticamente a la misma tasa, alrededor de 2.77% anual.
“Tal relación, añadió, se encuentra a nivel de entidad federativa: aquellas que contribuyeron mayormente al PIB nacional también lo hicieron al volumen nacional de Residuos Sólidos Urbanos (RSU)”.
No obstante, en algunos casos la contribución a la producción total nacional de RSU de algunas entidades se desvió notablemente de la tendencia general, como el Estado de México (que produce más residuos respecto a la tendencia) o Campeche (que produce menos de lo esperado).
Por ello, la diputada Ayala Díaz planteó exhortar a la SE a que en la medida de sus atribuciones, realice acuerdos con el sector empresarial para la utilización de materiales biodegradables y amigables con el medio ambiente en lo relacionado con envases, empaques y embalajes.
En tanto, solicitó a Semarnat impulse una cruzada de concientización en aras de que la población, comprenda la importancia de separar y recolectar la basura, desperdicios y desechos. Además, que Profeco, realice campañas en pro de una cultura de consumo de productos y servicios amigables con el medio ambiente y la salud pública[.]