El Senado de la República se aprobó un punto de acuerdo para solicitar a la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, (CONAVIM), para que envíe en un plazo de 30 días un un informe respecto a cómo se atiende y previene la violencia en contra de las mujeres, particularmente, a las indígenas y afromexicanas.
En la exposición de motivos, la Comisión de Asuntos Indígenas del Senado, señala que, de acuerdo a cifras reveladas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, (CNDH), durante el primer mes de este año, ocurrieron en promedio 9 asesinatos de mujeres al día. En contraste, las cifras de los años 2015 y 2016 registraron 7 feminicidios diariamente.
La CONAVIM expone que la violencia en contra de las mujeres indígenas, ocurre entre múltiples estructuras de opresión y potencializa las desventajas, las exclusiones y desigualdades entre las féminas indígenas.
En el documento, se detalló que entre la población indígena aún prevalecen prejuicios hacia la cultura de la denuncia. Hay un mínimo registro de quejas, debido a que las indígenas desconocen sus derechos y los procedimientos para denunciar. Además que se acostumbran a la violencia y terminan por observarla como algo normal. Otro factor que incide negativamente, es que se les niega la atención, y por ser monolingües, no tienen acceso a un traductor.
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas, el 45% de víctimas de trata, son niñas indígenas que son engatusadas por el crimen organizado para ser explotadas, violadas o vendidas[.]