Atenderse médicamente aquí, que es el centro médico internacional por excelencia, es tradición entre crecientes segmentos de la población mexicana. Para los hospitales de esta ciudad estadounidense, el mercado mexicano tiene una relevancia particular y han empezado a vislumbrar que el potencial del turismo médico proveniente de México es más grande del que han recibido.
El caso del Houston Methodist Hospital es totalmente representativo. Este hospital, que es el más grande e importante de Texas y está entre los más prestigiados de Estados Unidos (EU), ha visto que en lo que va del 2013 el número de pacientes mexicanos atendidos en sus instalaciones se ha elevado en 20%, respecto del 2012. En lo que va del 2013, los especialistas del Houston Methodist han atendido médicamente a más de 1,700 pacientes mexicanos. Una proporción bastante importante si consideramos que cada año el Houston Methodist Hospital atiende a 7,000 pacientes extranjeros en promedio. Prácticamente, una cuarta parte de sus pacientes globales son mexicanos.
Y le llegan pacientes de todo el mundo. De Arabia Saudita, de China y diferentes regiones de Asia, de Europa, de Centro y Sudamérica, pero, con mucho, del país del que más recibe es México.
Ahora está sucediendo un fenómeno que a los directivos de este centro hospitalario les hace buscar estrategias para seguir fomentando y no perder la llegada de mexicanos: el cambio generacional de médicos. Los fuertes vínculos en el área médica entre Houston y México han obedecido en mucho a la relación cercana entre especialistas. En los últimos años, esos médicos tanto de Houston como de diferentes ciudades de México se han estado jubilando y están siendo sustituidos por más jóvenes, que ya no tienen ese nexo personal con uno u otro país; aparte, ya hay especialistas de primer nivel en territorio mexicano cuyo interés es que su paciente no salga de México para atenderse.
Además, para grandes hospitales privados en México, como Grupo Ángeles o Médica Sur, y muchos del norte del país, el centro médico de Houston representa una fuerte competencia y estarán viendo cómo dar la batalla por esos pacientes mexicanos que prefieren atenderse en Houston.
Algo interesante que dice el director médico del Hospital Metodista, el doctor. Víctor Fainstein, es que atiende a muchos mexicanos con VIH, quienes van periódicamente, reciben su tratamiento y están bien controlados. Lo que más ofrece el Hospital Metodista entre pacientes mexicanos son las especialidades de oncología, neurocirugía, cirugía, cardiología y ortopedia. En el caso de cáncer de mama, por ejemplo, es frecuente que lleguen las pacientes por terapias novedosas o de última generación, que aún no son aprobadas en México.
Hay un punto que vale destacar: la tradición internacional del Hospital Metodista de Houston obedece -sí a su prestigio y trayectoria en investigación médica, a que cuenta con médicos muy destacados y la más moderna tecnología, equipamiento e infraestructura en el ámbito hospitalario-, pero también a una estrategia integral con visión global a la cual el hospital le da mucho peso.
Y ésta incluye servicios que van más allá de la propia atención médica y que buscan resolver la vida a pacientes y familiares durante su estancia en EU. Sus servicios van desde transporte aéreo y terrestre, asistencia aeroportuaria y de alojamiento, traducción, agenda de citas médicas, asesoría financiera para cotizaciones de “una segunda opinión”, opciones de pago, centro de negocios, etcétera. Y cuenta, por ejemplo, con un programa de check ups para ejecutivos, planeados y definidos previamente mediante cuestionarios, de modo que en un solo día se hacen todas las consultas y estudios requeridos.
Todos, elementos inequívocos de lo que debe incluir una estrategia de turismo médico.