La OMS presenta plan de acción para controlar la propagación de la gonorrea.
Millones de personas afectadas por gonorrea podrían quedarse sin tratamientos a menos que se tomen medidas urgentes, alerta la Organización Mundial de la Salud (OMS). Varios países como Australia, Francia, Japón, Noruega, el Reino Unido y Suecia han notificado casos de resistencia de esta infección a cierto tipo de antibióticos (cefalosporinas) que son la última opción contra la gonorrea, señala el organismo mundial de salud.“La gonorrea se está convirtiendo en un grave problema de salud pública debido a la elevada incidencia de infecciones contra las que cada vez hay menos opciones de tratamiento”, explica la doctora Manjula Lusti-Narasimhan, del Departamento de Salud Reproductiva e Investigaciones Conexas de la OMS.
“Nos tienen muy preocupados los informes recientes sobre casos de fracaso del tratamiento con la última opción eficaz de tratamientos, las cefalosporinas, pues no se están obteniendo nuevos medicamentos”, acota la Dra. Lusti-Narasimhan.
Sin la vigilancia epidemiológica adecuada, no conoceremos la magnitud de la gonorrea resistente a los antibióticos argumenta la especialista y deja claro que si la investigación y el desarrollo no se dirigen a obtener nuevos antibióticos, en poco tiempo nos quedaremos sin un tratamiento eficaz para los pacientes con esta infección.
El plan de acción mundial de la OMS para controlar la propagación de la gonorrea y los efectos de la resistencia a los antibióticos también recomienda notificar las cepas resistentes, así como mejorar la prevención, el diagnóstico y el control de las infecciones causadas por esta bacteria. La gonorrea es una de las cuatro infecciones de transmisión sexual que pueden curarse, las otras son sífilis, clamidia y tricomoniasis .
Desde la aparición de los antibióticos, este microorganismo patógeno ha adquirido resistencia a muchos antibióticos comunes, como la penicilina, las tetraciclinas y las quinolonas.
La resistencia a los antibióticos es consecuencia del uso excesivo de fármacos y, a veces, del empleo de antibióticos de mala calidad; también intervienen en la aparición del fenómeno ciertas mutaciones genéticas del microorganismo patógeno, precisa la OMS y considera que la magnitud de la resistencia a escala mundial aún se desconoce porque en muchos países no hay datos fiables acerca de la gonorrea ni se realizan suficientes investigaciones.
Fuente: OMS
