En el marco del Día del Paludismo en las Américas (6 de noviembre), la Organización Panamericana de la Salud (OPS) convoca a los países de la región a tomar medidas urgentes para frenar el incremento de los casos, mantener los logros y librar al continente de la malaria, una enfermedad que en el siglo pasado era la principal causa de muerte en casi todas las naciones del mundo.
Paraguay fue certificado por haber eliminado la malaria de su territorio en junio de 2018. Argentina está en camino a obtener la certificación en 2019 y Belice, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, México y Suriname tienen el potencial de alcanzar la eliminación para 2020. Sin embargo, otros países registraron un aumento en el número de casos, lo que amenaza la consecución de las metas de reducción de casos y la correspondiente eliminación de la enfermedad en la región para el 2030.
[recuadro]El Día del Paludismo en las Américas fue instituido por los Estados Miembros de la OPS en el Consejo Directivo de 2008 y es una ocasión para poner de relieve la necesidad de invertir en la prevención y control de la enfermedad en las Américas. Se estima que los esfuerzos regionales coordinados por la OPS y sus socios han salvado cientos de vidas, al reducirse las tasas de mortalidad 30% entre 2000 y 2017.[/recuadro]“La eliminación de la malaria está hoy más cerca que nunca”, afirmó la Directora de la OPS, Carissa F. Etienne. Sin embargo, consideró que “no podemos confiarnos ni relajar las acciones, los esfuerzos de control deben redoblarse donde la incidencia ha repuntado”, sostuvo.
Desde 2015, los casos de malaria en las Américas aumentaron 71%. El 95% del total se concentraron en 5 países, principalmente en áreas específicas donde se han debilitado los esfuerzos contra la enfermedad. Muchos de los afectados son poblaciones indígenas, personas que viven en situaciones de vulnerabilidad y poblaciones móviles como mineros y migrantes.
“Si queremos eliminar la malaria, necesitamos mayores inversiones y ampliar el acceso a la prevención, el diagnóstico y tratamiento oportunos de la enfermedad en las comunidades que concentran la mayoría de los casos”, consideró Marcos Espinal, Director del Departamento de Enfermedades Transmisibles y Determinantes Ambientales de la Salud de la OPS.
Muchos países de la Región están ampliando sus esfuerzos para controlar y eliminar la malaria con el apoyo de la OPS, USAID y otros socios. En 2013 se lanzó la iniciativa de “Eliminación de la Malaria en Mesoamérica e Isla la Española” con la finalidad de eliminar la malaria en 9 países para el 2020. Desde entonces, la Alianza Malaria Zero, lanzada en 2015, se ha unido a este objetivo de eliminar la enfermedad en 2 de estos países, Haití y la República Dominicana. Asimismo, este año el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), junto a otros colaboradores y la OPS como socio técnico principal, puso en marcha otra iniciativa que busca acelerar los esfuerzos para eliminar el paludismo en Mesoamérica.
Esta semana, la OPS reunirá en su sede en Washington a socios y a representantes de los 10 municipios de la Región con mayor carga de la enfermedad para analizar mejores prácticas que pueden ayudar a controlar la malaria. Se prevé la participación de representantes de los municipios:
- Cruzeiro do Sul, Brasil
- Quibdo, Colombia
- La Gomera, Guatemala
- Les Anglais y Les Irois, Haití
- Puerto Lempira, Honduras
- Puerto Cabezas, Nicaragua
- Andoas, Perú
- Bermudez y Sifontes, Venezuela
Asimismo, el 6 de noviembre de 2018 tendrá lugar la entrega de los premios Campeones contra el Paludismo en las Américas, que este año distinguirá por sus esfuerzos hacia la eliminación de la enfermedad y la prevención de su restablecimiento a:
- Programas de control de la malaria de 2 municipios de Brasil (Alto Río Solimões y Machadinho D’Oeste)
- Programa de Malaria del Ministerio de Salud de Suriname
- Programa Nacional del Control del Paludismo de Paraguay