Al respecto el Dr. William A. Zoghbi, presidente del Departamento de Cardiología del Houston Methodist DeBakey Heart and Vascular Center afirma que, si no se tiene cuidado, las situaciones estresantes prolongadas pueden desencadenar inflamación y factores de riesgo que pueden aumentar las posibilidades de desarrollar enfermedad cardíaca o empeorarla para quienes ya la padecen.
“Tradicionalmente, el estrés por sí sólo no causa enfermedades cardíacas, pero estudios recientes muestran que puede causar inflamación que afecta los vasos sanguíneos, mismos que son los encargados de irrigar sangre a los órganos, incluidos el corazón y el cerebro. Esta inflamación puede provocar ataques cardíacos, derrames cerebrales y otros problemas de salud”, afirmó el especialista.“Si alguien presenta factores de riesgo como presión arterial alta, colesterol alto o diabetes, las situaciones estresantes crónicas pueden tener un efecto dañino potenciador”.
A las personas en situaciones de alto estrés les resulta difícil concentrarse, debido a que la atención la tienen puesta en la preocupación, lo cual ocasiona que algunos coman mal, beban demasiado alcohol, fumen más, no hagan ejercicio y no duerman lo suficiente. El Dr. Zoghbi advierte que es imperativo encontrar tiempo en el caos para aliviar y reducir el estrés.
“Las hormonas liberadas por el sistema nervioso simpático aumentan cuando hay una situación estresante y pueden aumentar el ritmo cardíaco y la presión arterial”, explicó el Dr. Zoghbi, quien también fue presidente del American College of Cardiology (ACC).
El reconocido especialista a nivel mundial del Houston Methodist Hospital sugiere que, en tiempos difíciles, las personas deberían encontrar una clase de manejo del estrés, relacionarse con amigos y familiares, hablar con un psicólogo o lo que sea necesario para evitar enfermedades del corazón y otras dolencias potencialmente fatales en el futuro.
Con información proporcionada por el Houston Methodist Hospital[.]