Abrigarse muy bien al salir de casa para evitar cambios bruscos de temperatura, consumir un cítrico al día, así como mantenerse hidratados son las principales claves para no contraerlas. Niños y adultos mayores los más vulnerables. Entre el 85 o 90% de las enfermedades de vías respiratorias no requieren de un antibiótico, por lo que se recomienda acudir al médico y evitar automedicarse.
Ante la presencia de bajas temperaturas que se registran en la mayoría del territorio nacional, el ISSSTE nos recomienda implementar diversas medidas de autocuidado como:- Abrigarse muy bien al salir de casa para evitar cambios bruscos de temperatura.
- Usar cubre bocas, principalmente en los pacientes que padecen alguna enfermedad pulmonar crónica como:
- Asma,
- Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)
- o cualquier otra infección de las vías respiratorias
- Consumo de cítricos.
El Jefe encargado del área de Neumología, cirugía de Tórax, Inhaloterapia y Fisiología Pulmonar, del Centro Médico Nacional (CMN) “20 de Noviembre”, Gildardo Cortés Julián, explicó que los grupos más vulnerables son los niños menores de 8 años y los adultos de más de 65 años, en donde los padres de familia o cuidadores deben reforzar las medidas de preventivas para disminuir patologías a causa de las bajas temperaturas.
Nos destaca que el consumo de cítricos en forma constante, incluso en aquellas personas que ya las han padecido pueden hacerlo de manera profiláctica. “El consumo de un cítrico al día (puede ser naranja, mandarina, piña o guayaba), frutas de temporada que son ricas en vitamina C van a provocar que el epitelio que cubre todas las vías respiratorias esté fuerte y que difícilmente cualquier microorganismo pueda instalarse en la persona”, detalló.
Asimismo, subrayó que todas las personas deben tener una hidratación óptima. “En los adultos se recomienda consumir alrededor de 2 litros de agua diarios, de preferencia en bebidas que sean calientes o tibias, ya que esto favorece que el moco de las vías aéreas sea fluido y cualquier microorganismo que se encuentre en contacto pueda ser fácilmente barrido. Una persona deshidratada puede ser un candidato a que un virus o una bacteria se instalen fácilmente en su cuerpo”, puntualizó.
Respecto a la importancia del uso del cubre bocas, sobre todo frente al importante descenso de la temperatura, Gildardo Cortés añadió que una de sus funciones principales de éste o de las mascarillas de eficiencia intermedia, consiste en evitar que entre aire frío a los pulmones al tiempo que permite se entibie en cada respiración y, al mismo tiempo, reduce los contagios cruzados por micro partículas. “Para quienes no tiene problemas pulmonares o que no están infectados por alguna enfermedad de vías respiratorias, se recomienda usar un pañuelo o bufanda para cubrir la nariz y boca para calentar el aire que entra”.
Enfatizó que la población debe evitar la automedicación. En su caso deberá acudir al médico, quien determinará cuál es el tratamiento adecuado dependiendo del cuadro sintomático. “Entre el 85 o 90% de las enfermedades de vías respiratorias no requieren de un antibiótico porque no son producidas por una bacteria sino por un virus, por lo que es importante que las personas eviten ingerirlos”, ejemplificó.
Finalmente recomendó poner especial atención en el uso de leña para disminuir el frío, ya que puede generar intoxicación, e incluso la muerte por inhalar monóxido de carbono si no existe una adecuada ventilación en la habitación donde se utilice. Lo mismo se recomienda con el uso de algún otro hidrocarburo: abrir las ventanas de las habitaciones donde se realice la combustión.