Para disminuir el número de pacientes en etapas avanzadas se propone cubrir el tratamiento desde su fase inicial y contar con base de datos de las personas con insuficiencia renal crónica. El diputado Felipe Reyes Álvarez propone exhortar a la Secretaría de Salud a implementar un programa de detección de enfermedades renales. Actualmente en México mueren 80 mil personas por enfermedades renales y es quinta causa de fallecimientos. En 2043 el padecimiento podría llegará a su nivel más alto, generando gastos por 20 mil millones de pesos.

[media-credit name=»SimpleFoto» align=»aligncenter» width=»562″][/media-credit]En México ocurren 80 mil decesos al año por enfermedades renales, constituyendo la quinta causa de muerte, por lo que es indispensable implementar medidas preventivas; se calcula que para el 2043 llegará a su nivel más alto y generará gastos por 20 mil millones de pesos, indicó el diputado Felipe Reyes Álvarez.

El diputado por Oaxaca Felipe Reyes Álvarez impulsa un punto de acuerdo por el que exhorta a la Secretaría de Salud a analizar e implementar en todas las instituciones públicas y privadas un programa de detección oportuna de enfermedades renales crónicas, a fin de disminuir el número de pacientes en etapas avanzadas.

Asimismo, le solicita que, en el ámbito de su competencia, pida a la Comisión Nacional de Protección Social en Salud incluir en el Fondo de Protección Contra Gastos Catastróficos (FPGC) a las personas mayores de 18 años con este padecimiento, cubriendo el tratamiento desde su fase inicial.

El punto de acuerdo también pide a dicha secretaría origine una base de datos de las personas con insuficiencia renal crónica, con el objetivo de implementar políticas públicas acordes a las necesidades actuales y se garantice el derecho a la salud con la incorporación de recursos financieros, humanos y materiales correspondientes.

Reyes Álvarez destacó que entre los principales factores de riesgo que acompaña la insuficiencia renal crónica se encuentran la diabetes y el sobrepeso, la primera afecta a 8.7 millones de mexicanos y el segundo a 48.6 millones.

El legislador resaltó que menos de la mitad de las personas con este padecimiento recibe tratamiento, debido a que resulta un gasto excesivo, ya que cada sesión de diálisis cuesta entre 8 mil y 15 mil pesos, lo que genera un deterioro físico, psicológico, emocional, social y financiero para los pacientes y su familia.

Aunado a ello, el FPGC contempla a los menores de 18 años para un trasplante renal, por lo que “urge
implementar medidas preventivas que permitan incluir este padecimiento ha dicho fondo, considerando que dentro de los gastos catastróficos se encuentran aquellas enfermedades que implican un alto costo, en virtud de su grado de complejidad o especialidad y el nivel de frecuencia con que ocurren”, acotó.

De acuerdo con el estudio “Epidemiologia de la insuficiencia renal crónica en México”, en el 2010 existía un crecimiento de al menos 40 mil casos nuevos al año, lo que implica que casi el 7% de la población estaría en peligro de padecer dicha enfermedad.

Detalló que el Fondo de Protección Contra Gastos Catastróficos, el cual inició en el 2004 con 620 millones de pesos, en 2010 atendió sólo 101 asuntos, “un margen demasiado bajo si se compara con el comportamiento de 40 mil casos anuales para ese mismo periodo”.

“La insuficiencia renal crónica es una enfermedad irreversible que afecta ambos riñones, provocando que estos pierdan la capacidad de filtrar las sustancias tóxicas de la sangre y, como consecuencia, se produce un deterioro progresivo del organismo hasta llegar a la muerte”, agregó.