Un nuevo informe del Grupo del Banco Mundial, Mujer, Empresa y el Derecho 2016 [1], presentado este 9 de septiembre de 2015 documenta que la brecha global sigue restringiendo las oportunidades económicas para las mujeres. La violencia y la falta de empleo son algunos de los principales obstáculos para las mujeres en los países en desarrollo.
En muchas economías en el mundo persisten barreras legales que impiden el avance económico de las mujeres, excluyéndolas de ciertos empleos, limitando su acceso al crédito y dejándolas desprotegidas contra la violencia, según el informe del Grupo del Banco Mundial, Mujer, Empresa y el Derecho 2016, presentado este miércoles.
El informe, que examina las leyes que impiden el empleo y la capacidad empresarial de las mujeres, concluye que éstas enfrentan restricciones al empleo en 100 de las 173 economías analizadas. Por ejemplo, en 41 economías las mujeres tienen prohibido trabajar en ciertos empleos en recintos industriales; en 29 economías se les prohíbe trabajar de noche y en 18 economías no pueden obtener un empleo sin el permiso de sus esposos.Sólo en la mitad de las economías analizadas existe la licencia por paternidad, y menos de la tercera parte cuenta con licencias parentales, lo cual limita las posibilidades de los hombres de compartir responsabilidades en la crianza de los hijos. En 30 economías, las mujeres casadas no pueden elegir dónde vivir y en 19 economías están obligadas por ley a obedecer a sus esposos.
Estas y otras desigualdades analizadas en el informe tienen consecuencias a largo plazo pues perjudican, no solo a las mujeres, sino también a sus hijos, sus comunidades y las economías de sus países. El informe calcula casi 950 situaciones de desigualdad de género, en el marco de siete indicadores.
«Es una grave injusticia cuando las sociedades establecen restricciones legales que limitan las posibilidades de las mujeres para conseguir empleo o participar en la vida económica. Las mujeres, al igual que los hombres, merecen tener oportunidades para desplegar su potencial, sin importar dónde vivan. Estas restricciones son además perjudiciales desde el punto de vista económico. Las mujeres representan más de la mitad de la población mundial. No podemos darnos el lujo de desaprovechar ese potencial, ya sea porque las leyes no logran proteger a las mujeres contra la violencia o porque las excluyen de las oportunidades financieras, de la posesión de bienes o del ejercicio de una profesión«, afirmó Jim Yong Kim, presidente del Grupo del Banco Mundial.
«Cuando las mujeres pueden trabajar, administrar ingresos y dirigir empresas, los beneficios se extienden mucho más allá del nivel individual y alcanzan a los hijos, a las comunidades y a las economías en su totalidad. No descansaremos hasta que las mujeres gocen de plenos derechos económicos en todo el mundo«, agregó.
Una reducida igualdad de género en la ley se asocia con un número menor de niñas en las escuelas secundarias, menos mujeres empleadas o en la gestión de empresas, y una diferencia más marcada entre los salarios de hombres y mujeres. Donde la ley no protege contra la violencia doméstica, es probable que las mujeres vivan menos años. Pero donde los gobiernos apoyan el cuidado infantil, las mujeres tienen más probabilidades de tener un empleo.
En el informe se observa que en 18 economías las mujeres no tienen restricciones legales en las áreas analizadas. Estos son:
- Armenia
- Canadá
- España
- Estonia
- Hungría
- Kosovo
- Malta
- México
- Namibia
- Nueva Zelandia
- Países Bajos
- Perú
- Puerto Rico
- República Dominicana
- República Eslovaca
- Serbia
- Sudáfrica
- Taiwán (China)
«A pesar que las leyes no garantizan un trato igual para las mujeres, son el primer paso hacia la creación de un terreno de juego parejo, donde las mujeres tengan la oportunidad de prosperar«, afirmó Sarah Iqbal, autora principal del informe.
Datos regionales
El informe bianual indica que la región de América Latina y el Caribe ha logrado notables avances hacia la igualdad de género en las áreas monitoreadas. En los últimos dos años, Jamaica eliminó la restricción al trabajo nocturno de las mujeres que existía desde 1942, México estableció la deducción fiscal por pagos por concepto del cuidado infantil, y Uruguay amplió la duración de la licencia de maternidad y paternidad. -Además, Uruguay también aumentó la edad mínima para contraer matrimonio con consentimiento para hombres y mujeres.
Nicaragua aparece como el país con más reformas de la región al introducir la licencia por paternidad y otorgar igual derecho a hombres y mujeres para ser jefas y jefes de hogar, así como elegir la sede del hogar conyugal. Asimismo, aumentó la edad mínima de hombres y mujeres para contraer matrimonio y mejoró los derechos de propiedad de la mujer en caso de divorcio.
En Suriname, se otorgó a las mujeres los mismos derechos que los hombres de transmitir la nacionalidad a sus esposos e hijos. Colombia, Costa Rica y Trinidad y Tobago aumentaron el tope en cuantía de las demandas que se pueden presentar ante un tribunal por menores cuantías, ampliando el acceso a la justicia para pequeñas empresas las cuales son muchas veces propiedad de mujeres. Jamaica cuenta actualmente con una oficina de crédito que emite informes sobre pequeños préstamos. El acceso a información crediticia puede incrementar la capacidad de la mujer para obtener un préstamo y constituir una empresa.
El informe, el cual examina leyes que impiden el empleo y la capacidad empresarial de la mujer, concluye que las mujeres casadas se ven afectadas por múltiples restricciones legales que afectan sus oportunidades económicas. En Barbados, Belize, Dominica, Grenada, Haití, San Vicente y las Granadinas, y Trinidad y Tobago, las mujeres casadas deben presentar documentación adicional al solicitar un pasaporte, lo cual no es exigido a los hombres casados. En las Bahamas las mujeres enfrentan más dificultades en transmitir su ciudadanía a sus hijos, y en Barbados no lo pueden hacer. Restricciones de este tipo, pueden limitar el acceso de las mujeres a los servicios públicos. En Bolivia, las mujeres casadas no pueden conseguir un empleo sin la autorización de sus esposos.
En cuanto a la violencia contra la mujer, todas las economías de la región, a excepción de Haití, tienen legislaciones contra la violencia doméstica. Pero la implementación y el cumplimiento de las leyes que protegen a las mujeres de la violencia sigue constituyendo un desafío.
No obstante, la región también muestra avances en otros frentes. En cinco economías (Bolivia, México, Perú, Puerto Rico, y Trinidad y Tobago) se han adoptado leyes que prohíben la discriminación por razones de género en el acceso al crédito.
Varias economías de la región promueven la participación política de la mujer mediante la aplicación de cuotas legales en los órganos electivos. Por ejemplo, en Bolivia, donde existe una cuota femenina obligatoria del 50% para las listas de candidatos y existen sanciones por la violación de dicho requisito, la presencia de mujeres en el Parlamento alcanzó el 53%. En El Salvador también imponen sanciones por la implementación no adecuada de las cuotas en las listas de candidatos. En los últimos dos años, México aumentó al 50% la cuota de género en las listas de los partidos políticos para las elecciones federales e introdujo el requisito de que los candidatos de ambos sexos se alternen en las listas. Por su parte, Haití, adoptó una nueva ley electoral que exige que uno de cada tres miembros de los consejos municipales sea una mujer.
Referencias
- Women, Business and the Law 2016: Getting to Equal http://wbl.worldbank.org/