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Un descuido en la cocina, un tropiezo en las escaleras o una tarde de juegos pueden derivar en una lesión que, aunque parezca menor, fácilmente se complica si no se trata bien desde el inicio. La Organización Mundial de la Salud señala que el 80 % de los accidentes ocurren en casa, y en México la Ensanut 2022 registró que el 5.74 % de la población, es decir 7.4 millones de personas, sufrió alguna lesión no intencional —un tercio quedó con secuelas permanentes.
Atender una herida de inmediato no es un detalle menor: es la mejor forma de prevenir infecciones, cicatrices y complicaciones graves. En este sentido, Priscila Cantú, Clinical Lead de Essity Health & Medical México, advierte que “si no se tratan adecuadamente, las heridas pueden comprometer la cicatrización”, y destaca que el 62 % requiere atención médica después de caídas, la principal causa de lesiones domésticas .
Para saber cómo actuar correctamente si alguien se lesiona en casa, la experta comparte estos seis pasos:
- Lavarse bien las manos antes de tocar la herida.
- Detener el sangrado con presión y una gasa limpia.
- Limpiar con agua corriente (no usar alcohol ni peróxido).
- Evaluar si la herida es profunda o está en zonas sensibles y, en ese caso, acudir al médico.
- Protegerla con apósito de buena calidad que no irrite la piel.
- Evitar remedios caseros no recomendados o antibióticos sin receta.
La campaña “Cuidando cada vida, cada historia”, de Essity/Leukoplast, promueve este abordaje: combinar prevención, recursos adecuados (como vendas que eviten irritaciones) y conocimiento para cuidar la piel desde casa. Porque una buena atención a una herida hoy puede significar una mejor calidad de vida mañana.
