A lo mejor en tu entorno laboral, en casa, películas o en las calles, has escuchado hablar de que hay niños(as) y jóvenes que están consumiendo inhalables. Tal vez hasta te ha tocado ver a alguien que abusa de ellos. Sin embargo, casi nadie menciona los graves daños que provocan en el cerebro y en otros órganos del cuerpo.

Los inhalables son sustancias químicas tóxicas que se transforman fácilmente en vapor o en gas cuando se exponen al aire. Cuando se inhalan de manera voluntaria para experimentar efectos parecidos a los de otras drogas, provocan graves daños en todo el cuerpo.

En pocos minutos, estas sustancias llegan rápidamente al cerebro. Sus efectos son parecidos a los de una borrachera: mareo, dificultad para coordinar los movimientos y para hablar.

Los inhalables afectan las neuronas porque disminuyen el oxígeno que necesitan para su adecuado funcionamiento, también reducen la capacidad de aprender nuevas cosas (incluso es difícil platicar); disminuyen la capacidad de resolver problemas complicados y de poder planear el futuro y producen daños en varias partes del cerebro, algunos de éstos pueden ser permanentes.

Destrucción de la mielina

Imagínate un cable como el que usa tu estéreo para enchufarse a la corriente eléctrica. El cable está recubierto por un plástico. Cuando este plástico se daña o se rasga, se puede producir un corto circuito o una descarga eléctrica que puede dañar el funcionamiento del aparato, dejándolo inservible.

La mielina es como el “plástico aislante” que protege a las células de tu sistema nervioso. Los inhalables destruyen esta protección y por eso te puedes quedar ciego(a), sordo(a), sufrir de convulsiones o temblores, sin posibilidades de caminar o hablar bien, entre otros daños. Desde el primer consumo, la persona puede morir por un paro cardíaco, asfixia o accidentes.

Los efectos de los inhalables en una persona estresada o ansiosa pueden ser mortales. No sólo le falta oxígeno al cerebro, también el corazón altera su ritmo cardíaco, provocando la muerte a los pocos minutos. Se le conoce con el nombre de: muerte súbita por inhalación.

¿Cómo saber si alguien está consumiendo inhalables?

Las señales varían de acuerdo con el tipo de inhalable, las más frecuentes son:

• Olor o aliento a sustancias tóxicas
• La piel alrededor de la nariz, labios y boca se ve enrojecida o irritada
• Hay manchas de químicos en la ropa se observa que las mangas o puños se encuentran desgastados
• Ojos rojos o con la mirada “perdida”

Si alguien que conoces abusa de inhalables, puedes hacer varias cosas para ayudar: háblale de los daños, busquen apoyo de un médico para pedir tratamiento o llamen por teléfono para recibir asesoría.

Referencias

1. Información proporcionada por la Secretaría de Salud y CENADIC en la Feria de la salud. Facultad de Química, octubre 2014.
2. Página de internet: http://www.cenadic.salud.gob.mx