Los delegados de la 68 Asamblea Mundial de la Salud aprobaron una resolución que convoca a los países miembros a intensificar sus esfuerzos en los cuidados que brindan a las personas con epilepsia. Aunque existen tratamientos accesibles para la epilepsia, más de un 90% de las personas con esta condición pueden no haber recibido un diagnóstico adecuado o pueden recibir un tratamiento sin los recursos adecuados.
La resolución destaca la necesidad de los gobiernos de formular, fortalecer e implementar políticas nacionales y legislación para promover y proteger los derechos de las personas con epilepsia. También señala la necesidad de fortalecer la información en salud y los sistemas de vigilancia para obtener una idea clara sobre la carga de esta enfermedad, de manera de poder medir los progresos en la mejora del acceso a la atención.Los delegados enfatizaron sobre la importancia de entrenar a trabajadores de la salud que no son especialistas, como un grupo clave para reducir la brecha en el tratamiento de la epilepsia. Las estrategias para mejorar el acceso y los costos para las medicinas antiepilépticas en áreas de bajos y medianos recursos, deberían ser prioritarias. Se alienta a los países a realizar actividades de sensibilización para reducir los conceptos erróneos sobre la epilepsia y para alentar a que más personas busquen tratamiento. Debe construirse la capacidad de investigación de países de bajos y medianos ingresos a través de la expansión de la colaboración académica y del establecimiento de centros de excelencia.
La resolución llama a la OMS a continuar liderando y coordinando el apoyo a los Estados Miembros en abordar la carga mundial de la epilepsia para que las personas que la padecen puedan recibir tratamiento oportuno y se puedan beneficiar de las oportunidades educacionales y laborales, sin estigma ni discriminación.