Reconozco que todo lo que yo pueda expresar en estas líneas demeritaría una prueba tan difícil de enfrentar como el cáncer de mama. Estas líneas no tiene que ver con el proceso de duelo, ni procedimientos médicos, técnicos o científicos, tiene que ver con pacientes que he tenido frente a mí que han padecido esta enfermedad y todo lo que he aprendido de ellas.

Si bien es cierto que en cuestión de impacto emocional y proceso de duelo hay entre la mayoría de las personas rasgos generales comunes, todas las personas son diferentes y las condiciones emocionales en que llegan al consultorio no es la misma. Mi propósito es mencionar algunas cosas que he escuchado de ellas, para que los que no están pasando por esta enfermedad, pero que tienen cerca a alguien en esta situación tengan idea de cómo pueden apoyarlas de la mejor manera.

Estos son algunos de los pensamientos que mencionan cuando llegan al consultorio mujeres con cáncer de mama:

1. Quiero que me ayude, ya no se qué hacer para consolar a mi familia, porque a pesar de lo mal que me siento físicamente trato de ser fuerte porque no quiero hacerlos sentir tristes, no sé que voy a hacer cuando mi cuerpo no me responda
2. Yo sé que mi familia y amigos me quieren pero ya no quiero escucharlos estoy saturada de información
3. No quiero que el cáncer sea un miembro más de mi familia, ya se habla más de mi enfermedad que cualquier otra cosa y yo necesito olvidarme por un momento que estoy enferma
4. No quiero anunciar que tengo cáncer, ni que lo anuncien los demás, lo que se ve no se juzga, ¿porque tengo que repetir mi historia todo el tiempo?
5. Mi familia dice que lo mejor para mi, en caso de perder un seno o los dos, es ponerme implantes para sentirme “normal” y mi esposo no sufra.

   -No puedo evitar sentir enojo y frustración. Pienso: Yo solo estoy enferma ¿Ya no soy normal?,

   ¿Acaso mi sufrimiento no cuenta?

6. Me molesta que ya mi familia no me dice lo que está ocurriendo porque me hace daño, no se dan cuenta que soy la misma persona y tengo derecho a saber no solo lo que pasa conmigo sino en mi casa y con mi familia.
7. Todos quieren decirme como “debo” sentirme, tratan de que yo esté todo el tiempo acompañada y yo hay días que no quiero ver a nadie.
8. Amo mucho a mi familia, pero quieren protegerme tanto que han dejado de escucharme.

….etc. Estas frases son solo algunas de las tantas que escucho, mi intención con esta publicación es que las personas que están cerca de personas con cáncer de mama, tengan una idea de algunas de las situaciones que se enfrentan en el proceso de recuperación de esta enfermedad.

Es importante mencionar que independientemente del equipo integral que una paciente con esta enfermedad requiere como médicos, sicólogos o terapeutas, grupos de apoyo…etc, los amigos y principalmente la familia es fundamental, por este motivo estas líneas son principalmente de reflexión para ellos, independientemente de las buenas intensiones y en mayoría de los casos el amor incondicional hacia la persona que está pasando por esta enfermedad es importante que tengamos una idea de lo que les está ocurriendo y no se atreven a decirnos.

Las mujeres con cáncer de mama necesitan sentir: que en su vida solo van a pasar por un proceso de recuperación, que son escuchadas, que son tomadas en cuenta en decisiones importantes, necesitan tener confianza de decir que no quieren ver a nadie sin herir susceptibilidades, necesitan que su ambiente familiar sea lo más similar posible al que había antes de la enfermedad, y lo más importante necesitan sentir que ellas son dueñas de su vida, que son y significan mucho más que cualquier enfermedad son fuertes y valiosas.

Sé que esto que comento solo son algunos pensamientos que escucho respecto al tema, pero espero humildemente que mis palabras sean útiles y apoye en algo a una paciente con esta enfermedad y a su familia.