La secretaria de la Comisión de Igualdad de Género, Karina Padilla Ávila, presentó un punto de acuerdo para exhortar al Ejecutivo federal a extender la cobertura del Programa de Estancias Infantiles para Madres Trabajadoras a progenitoras adolescentes y jóvenes, para que puedan continuar sus estudios o estén en posibilidad de integrarse al mercado laboral.
Además, la legisladora le solicitó ejercer las atribuciones que le confiere la fracción III del artículo 12 de la Ley del Seguro Social, para que incluya a las madres que estudian en el seguro de guarderías, a fin de que puedan continuar sus estudios.Indicó que la propuesta busca promover acciones que eviten que las niñas y las mujeres jóvenes deserten de la escuela a causa de un embarazo a temprana edad, y se les dé la posibilidad de independencia económica.
La diputada consideró que sin autonomía económica es muy complicado que las mujeres realmente puedan ejercer el resto de sus derechos a cabalidad; por ello, la importancia de brindarles las opciones para prepararse y trabajar en lo que decidan libremente, en condiciones y con salarios iguales a los que perciben los varones, resaltó.
Expuso que, de acuerdo con estudios del Banco Mundial, un año adicional de escolaridad secundaria en las niñas puede aumentar su salario en 10 a 20% en el futuro.
Dicha investigación apunta que las niñas con poca o ninguna educación son mucho más propensas a estar casadas antes de los 18 años y sufrir violencia doméstica, vivir en la pobreza y carecer de voz y voto sobre el gasto de los hogares o de su propia salud, “lo que las perjudica a ellas, a sus hijos y hasta a sus comunidades”.
Este organismo también sostiene que las mujeres con mayor nivel educativo tienden a casarse más tarde y tener menos hijos, así como a tomar decisiones y actuar en beneficio de la descendencia, es decir, los retrasos en el matrimonio están asociados con un mayor rendimiento escolar y la disminución de la fecundidad.
La diputada panista indicó que, a pesar de los avances logrados en las últimas décadas, resulta preocupante que aún hoy en día el embarazo adolescente y la maternidad temprana son considerados entre los principales factores que influyen en la deserción escolar de 280 mil adolescentes cada año, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Deserción de la Educación Media Superior.
La encuesta publicada en el 2012 por la Secretaría de Educación Pública (SEP), también concluye que la gestación y la unión temprana de parejas son la segunda causa por la que dejan de estudiar; la primera es la falta de recursos económicos.
Padilla Ávila enfatizó que es fundamental mejorar las condiciones y oportunidades para las niñas, adolescentes y jóvenes en México, y ofrecer más apoyos a las que ya son madres, para que continúen sus estudios, y no truquen su proyecto de vida porque no cuentan con recursos para pagar una guardería particular.
Agregó que el Programa de Estancias Infantiles de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) ya brinda el apoyo a las madres que estudian; sin embargo, se ve restringido a que las cuotas de las guarderías no sean mucho mayores al apoyo que la dependencia federal tiene considerado a este fin.
Karina Padilla propuso que los recursos para cubrir esta prestación se canalicen a través del Programa de Fortalecimiento de la Calidad en Instituciones Educativas de la SEP, en el rubro relativo al apoyo de proyectos de perspectiva de género para disminuir la deserción escolar, que considera otorgar recursos a estancias infantiles o guarderías para las estudiantes de educación superior.