Un movimiento regional por la salud universal fue lanzado el pasado 12 de diciembre de 2017 en Quito, Ecuador, con el fin de identificar obstáculos y generar alianzas que permitan a los países de las Américas alcanzar la meta de salud para todos en 2030, sin dejar a nadie atrás.
La Directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa F. Etienne, afirmó que “la salud universal es más necesaria que nunca”, y sostuvo que el camino para lograrla “no es fácil, pero es posible y urgente”.A 40 años de la Declaración de Alma-Ata, que impulsó los valores del derecho a la salud, la equidad y la solidaridad, la región de las Américas sigue siendo una de las más inequitativas del mundo. Un tercio de la población aún enfrenta barreras de acceso a los servicios de salud.
“Garantizar el derecho a la salud implica eliminar todo tipo de barrera para el acceso a los servicios”, aseveró Etienne durante el cierre de una reunión regional sobre salud universal en Quito. Además, destacó la necesidad de acelerar la transformación de los sistemas de salud para que sean integrales, de calidad, y centrados en las necesidades de la población.
Verónica Espinosa, ministra de Salud de Ecuador, señaló que el encuentro ha sido una oportunidad para reafirmar el compromiso con los principios de la Declaración de Alma-Ata y marca el inicio de un año para perfeccionarlos. “Nunca antes hubo tanta tecnología, tanto conocimiento y voluntad política como ahora”, consideró.
Espinosa indicó que “contamos con recursos finitos, pero necesidades infinitas”, y manifestó que a través de voluntad política, diálogo y mayores esfuerzos se podrá avanzar hacia la salud universal, algo que, dijo, se logrará “desde el territorio, con la gente, para la gente y con una atención de salud renovada”.
Lanzado en el Día Mundial de la Cobertura Universal de Salud, el movimiento, denominado Foro Regional Salud Universal en el siglo XXI: 40 años de Alma-Ata, está integrado por representantes de gobierno, academia, sociedad civil y expertos de una treintena de países y territorios de la región.
La Vicepresidenta (encargada) del Ecuador, María Alejandra Vicuña ratificó el compromiso de su país de seguir trabajando para lograr la salud universal y el desarrollo sostenible, algo que requiere, dijo, erradicar las causas estructurales de la pobreza, una de ellas la falta de acceso a la salud. “No podemos hablar de garantizar el derecho a la salud sin agua segura y saneamiento para todos, sin hábitat seguro y vivienda digna”, manifestó.
Una comisión de alto nivel conducirá las actividades del movimiento y elaborará recomendaciones que guiarán el camino a seguir para lograr el acceso y la cobertura de salud para todos en 2030. La OPS ejercerá como secretariado técnico del Foro.