En una sesión informativa GSK México S.A. de C.V informó este 20 de abril de 2022 a los medios de comunicación en México que recibió la autorización de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) para el uso de la vacuna recombinante contra el virus del herpes zóster, en hombres y mujeres a partir de los 50 años —y mayores de 18 con riesgo incrementado de padecer la enfermedad—.
La vacuna está indicada para la prevención del herpes zoster y de la neuralgia posherpética; en adultos de 50 años o más y mayores de 18 años con riesgo incrementado de padecer herpes zoster.
“Con esta aprobación, los profesionales de la salud podrán ofrecer una alternativa de prevención a las personas en riesgo de contraer herpes zóster a consecuencia de la disminución progresiva y esperada de la capacidad inmunológica, asociada al envejecimiento, pero también para aquellas personas que padecen enfermedades que comprometen el sistema inmune como el cáncer, VIH, esclerosis múltiple, artritis reumatoide o condiciones como trasplantes de órganos o médula ósea”, señaló en un comuncado de prensa la doctora Yolanda Cervantes, Directora Médica de Investigación, Desarrollo Clínico y Asuntos Médicos de Vacunas en GSK México.
Causas
El herpes zóster es causado por la reactivación del virus de la varicela zóster [1] : luego de una infección primaria que causa la varicela, permanece durante toda la vida de la persona en estado latente en los nervios de los ganglios sensoriales (los que van de la médula espinal a distintas partes del cuerpo y llevan los estímulos sensitivos a todo el cuerpo) y, al reactivarse, provoca dolor de cabeza, fiebre, dolor muscular, y reacciones dérmicas diversas como erupciones vesiculares dolorosas [2]. Además, puede complicarse produciendo [3] accidente cerebrovascular, sobreinfección bacteriana, pérdida de la audición o la vista, parálisis, cicatrización, daño de fibras y células nerviosas [4],[5],[6] y neuralgia postherpética [7],[8],[9].
Inmunosenescencia
En vísperas de la Semana Mundial de la Inmunización, la doctora Cervantes advirtió que la disminución de la inmunidad relacionada con la edad —conocida como inmunosenescencia [10] — y las condiciones de inmunodepresión aumentan el riesgo de desarrollar herpes zóster: la inmunidad celular específica contra el virus de la varicela zóster disminuye paulatinamente a partir de los 50 años en adelante. Pero también en personas con inmunodepresión a consecuencia de condiciones médicas o consumo de medicamentos inmunosupresores, por lo que destacó que es importante la prevención a través de la vacunación.
Con el paso de los años, las personas están continuamente expuestas a una amplia variedad de estímulos, como la dieta, el ejercicio, las infecciones. A esta combinación de estímulos, a través de la cual se va dando la adaptación continua del sistema inmune, se le conoce como inmunobiografía [11],[12]. Es conveniente saber que, en este proceso, la participación activa en el autocuidado y los hábitos saludables son muy importantes, incluso en la edad adulta, donde continúan teniendo un impacto significativo, ayudando a mejorar la calidad de vida [13], [14].
Desarrollo del inmunofitness
De ahí que la vacunación sea un elemento clave para mantener la salud a lo largo de todas las edades [15], así como para el desarrollo del inmunofitness en adultos y adultos mayores, que es el estado en el que el sistema inmunológico es resistente y capaz de adaptarse de manera adecuada a los desafíos que le representan diferentes enfermedades [16].
Incidencia en México
En México, la incidencia de herpes zóster se calcula en alrededor de 220 mil casos al año: el riesgo estimado de desarrollar esta enfermedad a lo largo de la vida es de 10 a 20%, aunque en el caso de los adultos mayores de 75 años supera los 10 casos por cada mil personas al año, mientras que en el caso de personas que viven con VIH la incidencia llega a ser de 29.4 casos por cada mil habitantes al año. [17].[18].
Por otro lado, aproximadamente el 99.5% de los adultos mayores de 40 años tienen resultados positivos en pruebas de infección por varicela zóster, por lo que 1 de cada 3 personas puede desarrollar herpes zóster en su vida [19].
Referencias
1,4,7 Kimberlin DW et al. New Engl J Med 2007; 356:1338-43: https://www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMct066061
2 Harpaz R et al, MVWR Recomm Rep 2008; 57:1-30: https://www.cdc.gov/mmwr/preview/mmwrhtml/rr5705a1.htm
3 Opstelten W et al. Fam Pract 2002; 19:471-5: https://academic.oup.com/fampra/article/19/5/471/539233?login=false
5 Dworkin RH et al. Clin Infect Dis 2007; 44:S1-26:
https://academic.oup.com/cid/article/44/Supplement_1/S1/334966?login=false
6 Nagel MA and Gilde D. Curr Neurol Meurosci rep 2015:15:16: https://n.neurology.org/content/95/6/e708
8 Kawai K et al. BMJ Open 2014; 4: e004883: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4067812/pdf/bmjopen-2014-
004833.pdf
9 Dworkin RH et al. J Pain 2008; 9:S37-4: https://www.jpain.org/article/S1526-5900(07)00896-6/fulltext
10 Del Giudice G et al. NPJ Aging Mech Dis 2017;4:1: https://www.nature.com/articles/s41514-017-0020-0.pdf
11 y 12 Franceschi C et al. Front Immunol 2017; 8:982: https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fimmu.2017.00982/full
13 y 14 World Health Organization (WHO), 2002. Active ageing: a policy framework:
https://extranet.who.int/agefriendlyworld/wp-content/uploads/2014/06/WHO-Active-Ageing-Framework.pdf
15 Philip RK et al. Expert Rev Vaccines 2018; 17:851-864:
https://www.tandfonline.com/doi/pdf/10.1080/14760584.2018.1527690?needAccess=true
16 Verster JC. Special Issue “Exposome Pressure on Immune Fitness: the Impact of Lifestyle Factors” Int J Environ Res
Public Health 2020:
17 Alonzo-Romero Pareyón et al. Herpes Zoster Revision. Dermatología Rev Mex 2011; 55(1):24-39:
https://www.coursehero.com/file/53777887/herpes-zosterpdf/
18 Gnann JW, Hitley R. Herpes zoster. N Engl J Med 2002; 347:346: https://www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMcp013211