[/media-credit] De acuerdo con la Asociación Mexicana de Fibrosis Quística A.C., alrededor
de 400 niños nacen cada año en México con FQ; sin embargo, solamente 15%
de ellos son diagnosticados con vida, el resto fallece antes de cumplir los
4 años de edad por complicaciones respiratorias y desnutrición.
hereditaria y multisistémica que provoca la acumulación de moco espeso y
pegajoso en los pulmones, el tubo digestivo y otras áreas del cuerpo.
Es uno de los tipos de enfermedad pulmonar crónica más graves y frecuentes en niños
y adultos jóvenes, la cual sin un diagnóstico oportuno y un tratamiento
adecuado puede llevar a la muerte.
Debido a la importancia de esta enfermedad y sus cuidados, Fernanda
Zimmermann, nutrióloga del Instituto de Nutrición y Salud Kellogg´s (INSK),
proporciona algunos datos que describen esta enfermedad, así como algunas
recomendaciones de alimentación.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Fibrosis Quística A.C., alrededor
de 400 niños nacen cada año en México con FQ; sin embargo, solamente 15%
de ellos son diagnosticados con vida, el resto fallece antes de cumplir los
4 años de edad por complicaciones respiratorias y desnutrición.
Se cree que en México existen actualmente alrededor de 6,000 niños con FQ los cuales no tienen acceso a un tratamiento especializado, pero gracias a un diagnóstico a tiempo y mejores formas de tratamiento, cada vez son más los pacientes en México que alcanzan la vida adulta plena y productiva.
[/media-credit] La prevalencia de la desnutrición en los pacientes con fibrosis quística es
elevada, aunque variable.
sudor muy salado. Este moco pegajoso y espeso obstruye los pulmones, lo que
provoca infecciones pulmonares que amenazan la vida y problemas
respiratorios. El moco también puede obstruir los conductos del páncreas, lo
que impide que las enzimas digestivas alcancen el intestino, donde
normalmente ayudan a descomponer los alimentos para su absorción. Esto lleva
al desarrollo de problemas nutricionales.
La prevalencia de la desnutrición en los pacientes con fibrosis quística es
elevada, aunque variable. Los principales problemas nutricionales que
podemos mencionar en la FQ son:
* Escaso crecimiento o escasa ganancia de peso, principalmente en los
niños.
* Deficiencias de vitaminas, sobre todo de las vitaminas solubles en
grasa A, D, E, K.
* Mala salud de los huesos – debida a una mal absorción de la vitamina
D y del calcio-.Esto aumenta el riesgo de huesos fracturados y osteoporosis
en el futuro.
* Aumento de la pérdida de sal.
* Deficiencia de ácidos grasos esenciales.
Alimentos recomendados
El consumo de proteínas debe ser en su mayor parte de alto valor biológico.
Se recomienda una ingesta de fibra de aproximadamente 22 g al día. Es
recomendable hacer 3 comidas y 3 colaciones al día y complementarlas con
licuados ricos en calorías. Algunas recomendaciones para la dieta del
paciente con FQ son:
* Consumir leche entera (o parcialmente descremada) o leche
enriquecida.
* A la leche líquida se le puede agregar leche en polvo sin grasa
adicionada.
* Para los licuados de leche con fruta agrega miel, avena o amaranto,
nueces o almendras.
* Utiliza crema agria o yogurt natural sobre frutas, vegetales, y
alimentos en general, como por ejemplo en zanahorias, calabazas, puré de
papas.
* Agregar queso rallado, ajonjolí y cacahuates a las sopas, cremas,
salsas, verduras, arroz, pastas y carnes.
* Agregar trocitos de huevo cocido, tocino picado, cubitos de queso y
crotones a las ensaladas, sopas y cremas.
Una buena nutrición es crucial para las personas con FQ en todas las fases
de su vida, para mantener el crecimiento, un peso y estatura normales y para
ayudar a mantener el cuerpo fuerte para combatir las infecciones y optimizar
la función del hígado. Por esta razón podemos decir que el tratamiento de
esta enfermedad es multidisciplinario, siendo de gran valor el papel del
nutriólogo dentro del equipo de salud.
