De acuerdo a un nuevo estudio el estado de ánimo de las personas varía dependiendo el medio de transporte que usan y documentan en cuales sus usuarios se sienten más felices.
En un nuevo estudio publicado en la revista Transportation investigadores de la Universidad de Clemson estudiaron las emociones como felicidad, dolor, estrés, tristeza y cansancio que pueden variar durante el viaje y por el medio de transporte.
Utilizando datos de la American Time Use Survey (Encuesta de Empleo del Tiempo Americana), realizada por el Bureau of Labor Statistics (Oficina de Estadísticas Laborales), los investigadores pudieron determinar el estado de ánimo promedio que sienten las personas en diferentes medios de transporte.
“Encontramos que la gente se encuentra en el mejor estado de ánimo mientras andar en bicicleta en comparación con cualquier otro medio de transporte“, dijo Eric Morris, autor principal del estudio y profesor asistente en la planificación, el desarrollo y la conservación del departamento de la Universidad de Clemson.
Morris dijo que los ciclistas tienden a ser un grupo de auto-seleccionado que son muy entusiastas acerca de su modo de transporte.
“Los ciclistas son en general más jóvenes y físicamente saludables, que son rasgos que por lo general poseen las personas más felices“, dijo.
Los siguientes en ser más felices son los pasajeros de automóviles y luego los conductores de automóviles. Los que viajan en autobús y tren experimentan las emociones más negativas, aunque una pequeña parte de esto se puede atribuir al hecho de que el transporte público es utilizado de forma desproporcionada para ir y venir del trabajo, según los investigadores.
Sus hallazgos sugieren que el uso de la bicicleta puede tener beneficios más allá de los relacionados a la salud y transporte, y que mejora la experiencia emocional de los usuarios del transporte público puede ser tan importante como mejorar las características de servicio tradicionales, como direcciones de avance y velocidades de desplazamiento.
“Comprender la relación entre la forma en que viajamos y cómo nos sentimos permite entender mejor la forma de mejorar los servicios de transporte existentes, dando prioridad a las inversiones, teorización y modelización de los costos y beneficios de los viajes“, dijo Morris.
Referencia
- Eric A. Morris, Erick Guerra Mood and mode: does how we travel affect how we feel? journal Transportation DOI 10.1007/s11116-014-9521-x http://link.springer.com/article/10.1007/s11116-014-9521-x