Técnicas de reproducción
Cuando hay un diagnostico de infertilidad, existen diversos métodos de reproducción asistida, que pueden ayudar a la pareja que desea concebir. Todo dependerá de la severidad del problema y del tiempo que se lleve intentando lograr la concepción. Se estima que aproximadamente el 85% de las parejas infértiles van a lograrlo, independientemente de la dificultad que presenten.
Cada caso es diferente y el método que se utiliza es elegido específicamente para cada pareja. “Al mes tenemos un 20% de posibilidad de embarazarnos naturalmente. El método más efectivo será el que esté mejor indicado para la pareja, lo más importante es el diagnóstico que se haga a la paciente”, comenta el Dr. Sergio Goyri.
Las parejas deben llegar a las Clínicas de Reproducción Asistida con la idea de que puede ser rápido que salgan embarazadas, pero puede suceder que pasen años, hay parejas que incluso después de mucho tiempo no lo logran.
Son más frecuentes los casos de baja complejidad, que en ocasiones sólo necesitan coito programado o una inseminación artificial. Por ejemplo, cuando una mujer ya se ha realizado la salpingoclasia, lo que sucede es que, obviamente ya no se podrá llevar a cabo naturalmente el proceso. “La fecundación in Vitro, sería el método más adecuado para lograrlo. A través de esta técnica se hace lo que sucedería en la trompa, se une el ovario y el esperma para después ser implantado en la madre. Además, estas mujeres tienen muy buen pronóstico pues ya han tenido hijos”.
Otro procedimiento con muy buenos resultados, comenta por su parte el Dr. Carlos Maquita, director de Red Crea Medicina Reproductiva, es el método de Hatching o Eclosión Asistida, el cual, adelgaza con láser la zona pelúcida, -capa de proteínas que protégé al embrión-, para así favorecer que éste se asiente correctamente. Se sabe que esta técnica, incrementa hasta el 30% la taza de embarazo en mujeres que tienen dificultades para lograrlo.
La Eclosión Asistida es un método que complementa a otras técnicas de reproducción como la Fertilización In Vitro, en el que se ayuda a que los espermatozoides fecunden los óvulos fuera del cuerpo de la mujer; o bien, la Inyección Intracitoplasmática, en la que se inyecta un espermatozoide directamente. Independientemente de que se trate de un caso de infertilidad, tanto mujeres como hombres, debemos acudir a realizarnos revisiones médicas periódicamente; la mayor parte de los padecimientos cuando son tratados oportunamente no presentan mayores problemas.
Cómo protejamos nuestro cuerpo será la major enseñanza que le dejemos a nuestros hijos, porque al final, la salud es lo más importante que tenemos.
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