“Invertir en el empoderamiento económico de las mujeres contribuye directamente a cerrar la brecha de desigualdad de género, la erradicación de la pobreza y el crecimiento económico inclusivo”.

[media-credit name=»Plenilunia Salud Mujer | Elisa Guzmán» align=»aligncenter» width=»422″][/media-credit]Así lo dio a conocer en Seminario de los Centros de Justicia para las Mujeres, Ana Luz Díaz Smith, Directora de CREA: Comunidad de Emprendedores Sociales, quien destacó que en la asociación se ve al empoderamiento económico como un factor fundamental para lograr la igualdad entre hombres y mujeres, así como un factor que reactiva las economías de los países: “mujeres empoderadas económicamente tienen la característica exigir sus derechos, mayor probabilidad de tener independencia económica y social y aprovechar las oportunidades de educación, empleo y desarrollo”, dijo.

Mencionó que el 38% de la población económicamente activa en México corresponde a las mujeres, sin embargo comentó que muchas de ellas creen no tener la posibilidad y habilidades de emprender.

“En mi experiencia he visto que tres de cada cinco emprendimientos ante Hacienda son registrados por mujeres, sin embargo de estos, dos de cada tres no viven los primeros dos años y los que sí son emprendimientos que típicamente no crecen al potencial que crecen sus equivalentes encabezados por hombres o por equipos mixtos”.

Además subrayó que las mujeres siguen sufriendo violencia en México de manera desproporcionada, afectando la pobreza extrema y discriminación; ya que América Latina es de las regiones donde más pronunciada está la desigualdad de género. Por tanto comentó que las mujeres enfrentan barreras complejas en su participación en la economía formal y en su entrada como mujeres emprendedoras.

“En Crea nos dedicamos a empoderar económicamente a empresarias de zonas social y económicamente marginadas para que tengan acceso a mejorar sus oportunidades de desarrollo a través del éxito de sus negocios y su empoderamiento económico y personal”.

Explicó que en los Centros de Desarrollo Empresarial llegan mujeres empresarias o emprendedoras, se les hace un diagnóstico inicial y este indica áreas de oportunidades que tienen para mejorar sus emprendimientos. Además se les inscribe en cursos de capacitación, mismos que constan de información sobre: iniciativa personal, herramientas digitales y habilidades empresariales.

Al finalizar, la Directora empresarial indicó que la violencia se traduce en variantes negativas, como el costo de oportunidad por días laborales perdidos, la descapitalización y los daños de la empresa, dependiendo del ciclo de vida del negocio que involucre el quiebre de la empresa. Pero resaltó que el lado positivo del empoderamiento económico de las mujeres permite reducir el riesgo de experimentar violencia en varios aspectos:

1. Poder salir de una relación violenta y tener más herramientas porque no existe la dependencia económica.
2. Mayor poder de negociación dentro de la relación del hogar.
3. Reducción de la pobreza que permite reducir los factores desencadenantes de conflictos en la pareja.

Sitios de interés

• Crea Comunidades de Emprendedores Sociales http://www.crea.org.mx/