En México, la obesidad y el sobrepeso afectan a 7 de cada 10 adultos y 1 de cada 3 niños, en este contexto, Maricarmen Osés, especialista en nutrición clínica, destacó la importancia de incluir edulcorantes en la dieta de la población como herramientas para disminuir el consumo de azúcar y calorías al día.

Aunado a ello, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) el consumo máximo de azúcar debe ser de 6 a 12 cucharaditas al día, sin embargo; los mexicanos diariamente consumen hasta 23 cucharadas del endulzante, es decir, casi el doble de la cantidad recomendada, por ende, moderar el consumo de azúcar resulta fundamental para coadyuvar en prevenir enfermedades como sobrepeso y la obesidad.

En ese contexto, la también nutrióloga certificada por el Colegio Mexicano de Nutriólogos señaló que los edulcorantes -también conocidos como sustitutos de azúcar– “son aditivos alimentarios que cumplen la función de remplazar el azúcar o sabor dulce de nuestros alimentos, de ahí que se convierten en una gran herramienta que contribuye a la transición del estilo de vida actual, a uno más saludable con menos calorías”.

La especialista hizo un llamado a la población a recordar que los edulcorantes no funcionan para bajar de peso por sí solos, pues “únicamente son una herramienta que forma parte de un estilo de vida en el que la alimentación balanceada y la práctica de actividad física frecuente son necesarias”, puntualizó.

Por su parte, la nutrióloga y educadora en diabetes, Beatriz Portilla, Coordinadora de Nutrición de la Federación Mexicana de Diabetes, A.C, indicó que las personas con la condición requieren mayor conocimiento sobre las herramientas que hay a su disposición para el manejo de diabetes.

La educación en diabetes, señaló, propone que no hay alimentos prohibidos sino cantidades recomendadas. Finalizó destacando que en materia de edulcorantes se requiere más información para el público en general y los profesionales de la salud con la finalidad de que conozcan sus características y puedan utilizarlos de manera segura.

En México, los edulcorantes como Splenda son seguros para el consumo de toda la familia, incluidos niños, mujeres embarazadas, en lactancia, adultos mayores y personas que viven con diabetes. Además, cuentan con el aval de la Federación Mexicana de Diabetes y la recomendación de la Asociación Mexicana de Pediatría, asimismo del respaldo de organizaciones internacionales como la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en ingles)[.]