Resulta conveniente e importante detectar con el tamiz neonatal la pérdida auditiva desde el nacimiento para brindar tratamiento oportuno y así disminuir la discapacidad que se puede generar, ya que un menor que no escucha no puede desarrollar un correcto lenguaje, informó la jefa del Servicio de Audiología, María Eugenia Mena Ramírez del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) Dr.“Guillermo Ibarra Ibarra”.
En el marco del Día Internacional de la Audición, que hoy se conmemora, dijo que en los pequeños esta pérdida ocasiona problemas del habla, por lo que sin rehabilitación temprana no podrán trabajar, socializar y, sobre todo, son proclives al maltrato.De acuerdo al Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad (CONADIS) en México nacen entre 2 mil y 6 mil niños sin escuchar. La sordera congénita es la causa más común de discapacidad neurosensorial en este sector.
La doctora María Eugenia Mena indicó que en la actualidad en el INR se atienden 10 mil pacientes al año de todas las edades con problemas de este tipo. Con ello, se brinda la posibilidad de su inserción al entorno social y familiar.
Asimismo, subrayó que el tratamiento consiste en adaptarle el uso de auxiliares auditivos y una terapia encaminada hacia el desarrollo del lenguaje, mediante la terapia auditivo verbal.
Mena Ramírez aseguró que si después de este lapso el paciente no logra el desempeño que se espera o no es competente desde ese punto de vista se convierte en candidatos a un implante coclear.
La jefa del Servicio de Audiología del Instituto reiteró que los factores de riesgo para que un menor desarrolle pérdida auditiva son:
- infecciones vaginales,
- preeclampsia,
- sufrimiento agudo o bajo peso al nacer,
- hipopsia
- o el uso de medicamentos en las madres en el periodo prenatal.
El INR participa en el Programa Nacional de Atención Temprana de Hipoacusia, al ser el referente de los pacientes con pérdida auditiva a quienes, a través del Seguro Popular, se les donan auxiliares auditivos y brinda tratamiento.
También se capacita al personal del primer nivel de atención para la detección temprana de hipoacusia.
Finalmente, recomendó realizar el tamiz neonatal auditivo en el primer mes de vida y verificar el desarrollo del menor, su habla y respuesta.
Dicho tamiz es una prueba gratuita, sencilla y rápida, que permite detectar hipoacusia o sordera en recién nacidos sin causar dolor o molestia alguna. Consiste en colocar un pequeño “audífono” en el oído del bebé durante unos segundos, el cual registra si existe reducción auditiva.