En el marco del Día Internacional de las Personas de Edad, que se conmemora este 1 de octubre, la Organización de las Naciones Unidas estima que para el año 2050 tanto en países desarrollados así como en desarrollo, se duplicará el número de personas mayores de 60 años[1]. Lo anterior presenta la oportunidad de replantear las estrategias de prevención en salud pública, con el fin de que dicha población se vea beneficiada con los avances en esta área de la medicina.
Según datos del INEGI, entre las enfermedades de vigilancia epidemiológica, la principal afección en la población adulta mayor corresponde a las respiratorias agudas, que afectan a 24,204 personas de cada 100 mil, en edades que van de 60 a 64 años, y 19,600 entre las de 65 años y más, destacando las neumonías y bronconeumonías, enfermedades de importante porcentaje de letalidad para este grupo etario.[2].La neumonía, causada por neumococo, es una infección aguda que afecta a las vías respiratorias bajas (principalmente pulmones) y está asociada con aproximadamente 1.6 millones de fallecimientos cada año[3]. “El sistema de defensas del organismo decae con la edad en forma progresiva, siendo más evidente a partir de los 50 años, y la disminución de la respuesta inmune ante algún organismo patógeno puede ser significativa. Esto es un factor importante en el incremento de la morbimortalidad de algunas enfermedades; de ahí la importancia de la prevención“, dijo la Dra. Cecilia Guerrero, internista infectólogo egresada del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INNCMSZ).
“Llegar a una edad adulta con buena salud requiere de atención y esfuerzos. Para ello es importante fomentar hábitos saludables y preventivos, así como una actitud positiva que repercutan en beneficios para lograr una adultez en plenitud”, aseguró la Dra. Guerrero.
La especialista agregó que adicional al factor de riesgo que representa la edad, el padecer alguna comorbilidad como la diabetes, asma, cardiopatías, inmunosupresión o enfermedades crónicas de pulmón, favorecen la posibilidad de contraer neumonía, e hizo énfasis en que los familiares y cuidadores de adultos mayores deben considerar la vacunación contra el neumococo como un importante acto de prevención para proteger la vida de sus adultos mayores.
Al respecto, el Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos recomendó y aprobó la vacuna neumocócica conjugada trecevalente para proteger a adultos mayores de 65 años contra enfermedades causadas por neumococo[4] como es el caso de la neumonía, meningitis, sepsis o bacteriemia, especialmente aquellas en las que los serotipos que contiene la vacuna se encuentran involucrados.
En 2012 la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) aprobó la vacuna neumocócica conjugada trecevalente, de la cual se requiere solo una dosis, para proteger a los adultos mayores de 50 años de los 13 serotipos más comunes del Streptococcus pneumoniae, bacteria comúnmente llamada neumococo.
Referencias
- Día Internacional de las Personas de Edad http://www.un.org/es/events/olderpersonsday/
- ESTADÍSTICAS A PROPÓSITO DEL DÍA INTERNACIONAL DE LAS PERSONAS DE EDAD 2012 http://www.inegi.org.mx/inegi/contenidos/espanol/prensa/contenidos/estadisticas/2012/edad12.asp?s=inegi&c=2848&ep=103 Consultado el 1 de octubre de 2014
- Vacuna antineumocócica conjugada para la inmunización infantil Documento de posición de la OMS http://www.who.int/immunization/Pneumococcal_conjugate_vaccine_child_SP.pdf Consultado el 1 de octubre de 2014
- Use of 13-Valent Pneumococcal Conjugate Vaccine and 23-Valent Pneumococcal Polysaccharide Vaccine Among Adults Aged ≥65 Years: Recommendations of the Advisory Committee on Immunization Practices (ACIP) http://www.cdc.gov/mmwr/preview/mmwrhtml/mm6337a4.htm Consultado el 1 de octubre de 2014