Cuatro mitos y realidades comunes que giran alrededor del hábito de tomar agua

Hidratarnos adecuadamente es, sin duda, un hábito que ayuda a la salud, por ello es necesario mantenernos bien informados para no cometer errores y especialmente importante si deseamos fomentar hábitos de hidratación sanos.

1. Mito: Hay que tomar agua sólo cuando se tiene sed.

   Realidad: La sed se presenta cuando existe un ligero, pero importante grado de deshidratación, por ello no es bueno esperar a tenerla o a presentar resequedad en la boca. ¡Lo mejor es siempre anticiparse y mantenerse hidratado!

2. Mito: Beber agua durante las comidas dificulta la digestión y provoca que no comamos bien.

   Realidad: La absorción del agua es muy rápida y no afecta la ingesta de nutrimentos. Por el contrario, el agua durante la comida ayuda a mejorar los hábitos en el consumo de líquidos.

3. Mito: El agua es la única opción para que el organismo se mantenga hidratado.

   Realidad: El agua debe ser la bebida de primera elección para hidratarse, debido sus propiedades y características. Cabe señalar que hay otras opciones para incrementar la cantidad de líquido en el organismo como algunos alimentos, sobre todo frutas y verduras.

4. Mito: El aumento de peso es mayor cuando se consumen alimentos altos en calorías y menor al ingerir bebidas con la misma característica.

   Realidad: Pensar que las calorías de los líquidos son menores que las que aportan los alimentos sólidos, es erróneo. En algunos casos, las bebidas pueden aportar más energía que los alimentos y así contribuir al sobrepeso y obesidad. Hidratarnos adecuadamente es, sin duda, un hábito que ayuda a la salud, por ello es necesario mantenernos bien informados para no cometer errores.

Con información proporcionada por Nestlé Pureza Vital.