Desde nuestros principios más básicos, que son los fisiológicos, hombres y mujeres somos muy diferentes; lo que en ocasiones puede representar dificultades al momento de comunicarnos. Pilar Sordo nos dice que para hacer nuestras relaciones más armónicas, las mujeres debemos aprender a soltar todas las cosas que nos hacen daño; los hombres en cambio deben retener.
Para las mujeres esto puede ser bastante complicado ya que nos gusta sentirnos indispensables en nuestro hogar. En un principio duele bajar la guardia y nos afecta hasta el ego, pero después de un rato de entrenamiento, suele ser liberador y gratificante.
Tip’s para estar en equilibrio con los demás
• Aprender a dejar de hacer lo que nos hace mal.
• Luchar contra el sentirnos indispensables. Si no tienes ganas de lavar lo platos, no lo hagas no pasa de que se acumule un poco el polvo y los platos.
• Disfrutar el presente de donde estamos. Si estás en la oficina concentrarte en lo que estás haciendo y si estás en casa con tus hijos disfrútalos al máximo.
• Disminuir pensamiento mágico. Debes de tener los pies bien puestos en la tierra, aprendamos a ser un poco más realistas.
• Pensar en objetivos. Establecernos metas claras y concisas.
• Aprender a separar las cosas. Cada cosa tiene su lugar y su tiempo.
• Aprende a jugar. No nos olvidemos de nuestra infancia, siempre nos hace bien reírnos un rato.
Según la autora otra cosa que es importante tomar en cuenta es que los hombres no son adivinos, debemos ser explícitas con lo que queremos y necesitamos.
Dice que las mujeres debemos explotar las características propias de nuestro género para tener éxito profesional. Debemos establecer objetivos, debemos ser capaces de percibir los detalles, valorar y disfrutar cada instante, y concentrarnos en lo que estemos haciendo en el momento, dejando todo atrás.
El ser mujer es el privilegio del calor, de los detalles, de la creatividad y de la sensibilidad.