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La diabetes se ha convertido en uno de los principales retos de salud pública en México. De acuerdo con el Dr. Eduardo Márquez Rodríguez, endocrinólogo, 18.4% de los adultos mexicanos viven con diabetes, lo que equivale a cerca de 14 millones de personas, según datos de la Federación Internacional de Diabetes.
Aunque la mayoría de las personas vive con diabetes tipo 2, se estima que alrededor de 120 mil mexicanas y mexicanos tienen diabetes tipo 1, señaló el especialista. El panorama es preocupante: en los próximos 20 años, uno de cada cuatro mexicanos podría desarrollar esta enfermedad, impulsado por el aumento de casos de obesidad, hígado graso y presión arterial alta.
Un impacto que nos involucra a todos
El especialista subrayó que la diabetes no solo afecta la salud de la persona que vive con esta condición, sino también al sistema hospitalario y a la economía nacional. Cada año, alrededor de 44 mil personas con diabetes requieren hospitalización, con un costo estimado de 40 mil pesos anuales por paciente.
En conjunto, el país invierte más de 100 mil millones de pesos al año en la atención de la enfermedad, entre gastos directos e indirectos.

Sin embargo, la mayoría de las personas con diabetes en México no logra alcanzar un adecuado control glucémico: solo una de cada tres mantiene su hemoglobina glicada por debajo de 7%, el nivel mínimo recomendado para evitar complicaciones graves como infartos, accidentes cerebrovasculares o insuficiencia renal.
Monitoreo continuo: ver la “película” de la glucosa
Para el endocrinólogo, una de las herramientas más transformadoras en el manejo de la diabetes ha sido el monitoreo continuo de glucosa, que permite observar los niveles en tiempo real, más allá de las “fotografías” que ofrecían los métodos tradicionales.
“El monitoreo continuo cambia la experiencia del paciente, de los médicos y de los cuidadores. Ver cómo se comporta la glucosa todo el tiempo ayuda a tomar mejores decisiones”, explicó.
Diversos estudios han mostrado que el uso de sensores tipo flash, sin modificar el tratamiento ni la dieta, mejora el control glucémico en 0.4%, aumenta el tiempo en rango y reduce hospitalizaciones por hipoglucemias, infartos y complicaciones cardiovasculares.
Innovación que empodera a las personas que viven con diabetes
En este contexto, la empresa Abbott anunció la llegada a México de su sistema de Monitoreo Continuo de Glucosa FreeStyle Libre® 2, un avance tecnológico que ofrece lecturas automáticas cada minuto directamente en el smartphone, sin necesidad de escanear el sensor ni realizar punciones en el dedo.
Con esta nueva generación de sensores, las personas pueden recibir alertas automáticas cuando sus niveles de glucosa son altos o bajos, facilitando decisiones oportunas sobre alimentación, medicación o actividad física.
“Esta tecnología representa una verdadera evolución en el cuidado de la diabetes. Brinda tranquilidad y confianza a las personas y sus familias al anticipar niveles anormales de glucosa sin depender de frecuentes pinchazos”, señaló la Dra. Nélida Salazar, gerente médica senior del negocio de Cuidado de la Diabetes de Abbott.
El sistema utiliza tecnología Bluetooth y alarmas personalizables que pueden compartirse con padres o cuidadores a través de la aplicación LibreLinkUp, ofreciendo mayor seguridad, especialmente en niños, ya que el dispositivo está aprobado para su uso a partir de los 2 años de edad, detalló la Dra. Salazar.
El sensor, que se coloca en la parte posterior del brazo hasta por 15 días, proporciona una visión continua de las tendencias y patrones de glucosa, lo que ayuda a identificar cambios que podrían pasar desapercibidos y a mejorar la toma de decisiones diarias, explicó la experta.
“El control de la diabetes ha cambiado. Hoy no solo se trata de tratar la enfermedad, sino de entender su comportamiento en tiempo real para prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida”, concluyó el Dr. Márquez Rodríguez.






