La población urbana es la más propensa a esta enfermedad, por el ritmo de vida, se trata de una enfermedad asintomática que sólo se detecta cuando está por arriba de los 140/90 milímetros de mercurio en tres ocasiones seguidas.
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Recomendaciones
Mantenerse en el peso adecuado de acuerdo con la estatura, reducir la ingesta de carbohidratos y hacer ejercicio durante 30 minutos diarios reducen el riesgo de desarrollar hipertensión arterial.
Con información de la Secretaría de Salud.[recuadro]
En entrevista, José Alejandro Chávez Hernández, adscrito al Servicio de Cardiología del Hospital General de México, destacó que es fundamental prevenir o controlar este padecimiento, de lo contrario puede ocasionar infartos cerebrales o cardiacos sin que la persona se dé cuenta.
Detalló que la persona debe modificar su estilo de vida, evitar en lo posible el estrés, reducir el consumo de sodio, hacer ejercicio diariamente y tener un peso adecuado.
La población urbana es la más propensa a esta enfermedad, por estar sometida a mayores niveles de estrés, dormir menos, consumir mayores cantidades de café y productos que tienen alto contenido de sodio.
En México, precisó, cerca del 32% de la población padece hipertensión arterial, y es un problema que se puede presentar incluso en menores que tienen obesidad.
De no atenderse, provoca complicaciones en el corazón, riñón y cerebro. Entre las que destacan el crecimiento del corazón, falta de aire para respirar, manifestación de un síndrome coronario como angina de pecho o infarto al miocardio.
Destacó que cuando a un persona se le diagnostica hipertensión arterial, deberá tomar entre tres y cuatro medicamentos, para llegar a un control óptimo de la presión arterial, por debajo de los 140 /90.
El doctor Chávez Hernández recomendó acudir a las citas médicas mensuales o trimestrales, dependiendo el caso, para ajustarle la dosis del medicamento, a fin de disminuir el riesgo cardiovascular.
La presión alta, conocida también como presión sistólica, origina problemas cerebrovasculares y causar insuficiencia renal.
Mientras que la presión baja, llama presión diastólica, puede condicionar infarto al miocardio o insuficiencia cardíaca.
Algunas señales de alerta son:
- dolor de cabeza
- mareo
- zumbido de oídos
- ver luces o estrellitas.
Estos síntomas se pueden presentar tanto en presión alta como en extremadamente baja, por lo que es necesario acudir a la unidad de salud para tomar la presión en las piernas y los brazos, así como acostados, sentados y de pie.