La retinopatía diabética es la tercera causa de ceguera irreversible en el mundo, sin embargo, es la primera causa en personas en edad productiva en países en vías de desarrollo, por lo que es urgente desarrollar programas nacionales para la detección temprana y atención oportuna de esta complicación visual en México y América Latina.
Así lo expresa la reciente Actualización de la Guía Clínica de Retinopatía Diabética para Latinoamérica [1], presentada en el Congreso Mundial de Oftalmología 2016, celebrado en la Ciudad de Guadalajara, la cual fue desarrollada por la Asociación Panamericana de Oftalmología (PAAO), el Programa Visión 2020/IAPB Latinoamérica y el Consejo Internacional de Oftalmología (ICO).De acuerdo con la Federación Internacional de Diabetes, en América se estima que hay 64 millones de pacientes con diabetes, de los cuales hasta un 40% tiene algún grado de retinopatía diabética, lo que incrementa el riesgo de presentar ceguera irreversible. Y según datos de la Organización Mundial de la Salud, esta enfermedad es responsable de casi el 5% de los 37 millones de ciegos en el mundo.
La complicación más frecuente de la retinopatía diabética es el edema macular diabético, que ocurre cuando hay fuga de líquido de la mácula (es la parte de la retina responsable de la visión central), el cual puede presentarse en cualquier etapa de la retinopatía y es la causa más importante de limitación y ceguera visual, describe la reciente Guía Clínica de Retinopatía Diabética para Latinoamérica.
Afortunadamente, el riesgo de pérdida visual y ceguera por retinopatía diabética es prevenible en un 80% de los casos a través de un adecuado control metabólico de la diabetes mellitus, la detección oportuna y el tratamiento adecuado.
Un examen periódico y el tratamiento de retinopatía no eliminan todos los casos de pérdida visual, pero reduce considerablemente el número de pacientes ciegos por esta patología.
Y en ese sentido, la Guía Clínica de Retinopatía Diabética para Latinoamérica informa que uno de los avances en el manejo del edema macular diabético es el uso de terapias conocidas como medicamentos antiangiogénicos intravítreos, los cuales actualmente representan la primera línea de tratamiento para esta complicación de la retinopatía diabética, al mejorar la visión en pacientes con esta enfermedad.
En México desde el 2014 se cuenta con Aflibercept, innovador antiangiogénico disponible en el país para el tratamiento de la degeneración macular relacionada con la edad en su forma húmeda, el cual se estima que en el tercer trimestre de 2016 pueda contar con la autorización para su administración en edema macular diabético, para beneficio de los miles de pacientes que actualmente presentan daño visual por retinopatía diabética.
Es fundamental la educación, para promover en el paciente y en los familiares el autocuidado. La diabetes mellitus no afecta la visión hasta etapas muy tardías, por ello es necesario un buen control metabólico y la visita al oftalmólogo, a fin de retardar la aparición de la retinopatía diabética, evitando así alteraciones irreversibles que pueden conducir a la ceguera.
La actualización de la guía clínica favorece la toma de decisiones acertadas, basadas en evidencia científica, lo que contribuye a elevar la calidad y efectividad de la atención médica en los pacientes con retinopatía diabética.
Sitios de interés
- Asociación Panamericana de Oftalmología (PAAO) https://www.paao.org/index.php?lang=es
Referencias
- Actualización de la Guía clínica de Retinopatía Diabética para Latinoamérica 2016, Asociación Panamericana de Oftalmología PAAO Programa Visión 2020/IAPB Latinoamérica Consejo Internacional de Oftalmología ICO; 2106.