Necesario fortalecer la infraestructura en salud en todo el país, para el presente año estarán concluidos 6 compromisos más en materia de salud del Presidente de la República y más de 300 unidades médicas están en proceso de construcción en México. Se señaló que para evitar retrasos o atender necesidades estarán siendo supervisadas durante los próximos meses.
El objetivo de la reunión fue revisar el avance de las obras que integran los 27 compromisos en materia de salud del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto.Por instrucciones de la Secretaria de Salud, doctora Mercedes Juan, se llevó a cabo la Primera Reunión de Infraestructura en Salud, a la que asistieron representantes de 31 estados, en la cual se supervisó y se analizó el avance de obras hospitalarias en construcción.
Así lo informó la Subsecretaria de Administración y Finanzas, Marcela Velasco, quien presidió la reunión realizada en el Auditorio “Miguel E. Bustamante”, de esta dependencia, en donde puntualizó que la finalidad es brindar un seguimiento puntual del progreso de las obras que forman parte de los 27 compromisos en materia de salud del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto.Detalló que de estos compromisos:
- 25 se refieren a la creación de infraestructura;
- 3 de ellos se cumplieron en tiempo y forma durante el 2014, y
- Para el presente año -2015- estarán concluidos 6 más.
Mencionó que son más de 300 unidades médicas que están en proceso de construcción en todo el país y señaló que para evitar retrasos o atender necesidades estarán siendo supervisadas durante los próximos meses.
Ante los representantes de 31 entidades federativas, la Subsecretaria de Administración y Finanzas, dijo que se realizarán reuniones cada dos meses con el fin de tener una retroalimentación entre las autoridades federales y estatales.
En la reunión de trabajo estuvo presente el doctor Alberto Jonguitud, director general de Planeación y Desarrollo en Salud, quien expuso la necesidad de fortalecer la infraestructura en salud en todo el país y señaló que como consecuencia de los daños provocados por los fenómenos naturales en los dos últimos años en Baja California Sur y Guerrero, el Gobierno Federal se comprometió a construir unidades sanitarias en los municipios de Todos Santos y Acapulco, respectivamente.