Eloísa Chavarrías Barajas, secretaria de la Comisión Especial para el Fomento de los Programas Sociales para los Adultos Mayores, aseguró que México destina sólo el 0.4% del PIB a la atención de enfermedades músculo-esqueléticas, cuyo tiempo promedio de recuperación de hasta 12 semanas genera un alto costo en los servicios de salud y la seguridad social.

En su propuesta, turnada a la Segunda Comisión de la Permanente, la diputada federal mencionó que a esta problemática se agrega el hecho de que son pocos en el país los hospitales públicos que tratan esta clase de padecimientos; hay estados de la República donde no se cuenta con este servicio médico especializado, lo que fuerza a los pacientes a trasladarse a otras entidades para ser atendidos.

Chavarrías Barajas ejemplificó que las enfermedades de la cadera tienen un fuerte impacto social debido a la cantidad de pacientes afectados; la potencial incapacidad que generan; el elevado costo económico que significan, y las repercusiones que producen en el ámbito emocional del individuo, ya sean temporales o que deriven en depresión.

En este sentido, se refirió específicamente al denominado pinzamiento femoroacetabular (PFA) o síndrome de pinzamiento de cadera, enfermedad que afecta a la articulación de la cadera en adultos jóvenes y de mediana edad.

Este mal, precisó la legisladora en el documento, “ocurre cuando el cuello y la cabeza femoral rozan anormalmente con la cavidad del acetábulo, (cavidad del hueso coxal en la que se articula la cabeza del fémur), debido a un conflicto de espacio entre ambos durante el movimiento”.

Explicó que en general, la cadera es una articulación muy compleja de explorar y evaluar, ya que muchos dolores pueden aparecer en esa zona por distintas causas. El examen clínico es fundamental, al igual que conocer la historia del paciente, saber a qué se dedica y qué deportes práctica; a ello se suman estudios como radiografía de pelvis, cadera y, habitualmente, una resonancia magnética.

Señaló que el pinzamiento de cadera puede ser resultado de una anormalidad en el desarrollo de esta parte del cuerpo, o de actividades que impliquen movimientos recurrentes de las piernas “dentro de rangos suprafisiológicos, es decir, movimientos en rangos más allá de los esperables como el baile y las artes marciales“.

Chavarrías Barajas indicó que el dolor generado por este padecimiento muchas veces es limitante, ya que aparece de manera súbita e imposibilita al enfermo para realizar sus labores diarias o practicar algún deporte.

Por ello, la diputada pidió exhortar a la Secretaría de Salud a realizar una amplia campaña de información, prevención y tratamiento del llamado pinzamiento de cadera.