Columna
No me hablen para felicitarme por ser mujer
Otro día internacional de la mujer y aún me pregunto ¿por qué me siguen felicitando?.
Otro día internacional de la mujer y aún me pregunto ¿por qué me siguen felicitando?.
No festejo el amor. Al menos no sólo el 14 de febrero. Y curiosamente nunca he festejado ese día con mi pareja. Bueno, sí he festejado el día del amor y lo sigo haciendo, pero uno diferente. El amor a mis amigas, a su cariño durante estos 24 años… ¡Wow
Mónica Fiesco Cuando salimos de la preparatoria difícilmente sabíamos que la carrera que elegimos era justo lo que imaginábamos, o que cumpliría las expectativas o que de plano al ejercerla veríamos que no era para nosotros y terminaríamos dedicándonos a otra cosa.
Desde pequeñas nos enseñan a jugar a la mamá: a ser tierna, cuidadosa, preocupada por las necesidades de los hijos y de la casa.
¿Por qué si somos mujeres independientes, trabajadoras, exitosas, que decidimos qué hacer con nuestro cuerpo, nuestra sexualidad, creencias; dueñas de nosotras mismas, no nos hacemos o no queremos responsabilizarnos de nuestros pensamientos, y sobre todo, de nuestra felicidad? ¿Por qué dejamos que otros decidan si podemos ser felices?, ¿por qué damos ese poder a otros?
Para una mujer de 30 y tantos, ser soltera, no tener novio “formal” o no tener planes de casarse es igual a ser la tía quedada, al menos así lo piensa la familia.
