Se nos repite constantemente la importancia del cepillado de los dientes, pero poco nos imaginamos cuál es el efecto de la caries en la población y por supuesto, en nuestro cuerpo.
1. ¿Qué son?
La caries es la enfermedad que provoca los hoyitos que se encuentran en los dientes, los cuales son conocidos como lesiones cariosas. Es una enfermedad que no distingue edad, raza, ni sexo.
“Se estima que en México los niños en edad escolar, de 6 a 12 años, presentan 90 y en algunas regiones del país hasta 95 por ciento de caries; es decir, de cada 10 niños, 9 y medio tienen al menos una lesión cariosa”, comenta el Dr. Jaime Edelson, presidente ejecutivo del Patronato de la Fundación de la Asociación Dental Mexicana, IAP.
2. ¿Por qué se presentan?
Se sabe que se debe a muchos factores, pero que deben coincidir tres elementos:
- Tener dientes
- Presencia de microbios
- Debe haber un sustrato que los microbios al ingerirlo produzca un ácido, el cual desmineralizará el diente generándose cavidades posteriormente.
“Lo que sucede es lo siguiente: Todos los carbohidratos son cariogénicos; es decir, que producen caries. Entre más refinado sea el carbohidrato, el microbio que lo ingiera va a producir mayor número de microbios y el ácido que producen como un desecho de su metabolismo, irá afectando a los dientes para que se generen la caries. Esto es peor en la noche, porque si nos vamos a dormir con restos de alimento, les proporcionamos el ambiente ideal, oscuro y húmedo, para que se desarrollen.
El azucar es lo peor, porque es el más refinado, y además está en la dieta de todo el mundo. Lo más rico tiene azúcar, lo cual es fatal sobre todo el nos niños que a muy corta edad, tan sólo con 4 dientes y ya tienen en todos lesiones cariosas”, agrega el Dr. Edelson.
En la boca tenemos un cierto PH, grado de acidez, el cual se ve modificado cada consumimos un alimento. Cuando se trata de azúcares de inmediato se acidifica, proporcionando un medio ideal para que se reproduzcan.
“PH es la relación entre lo ácido y lo básico, lo normal es que esté entre 6, y 6 y medio. La acidez de la boca también puede venir del reflujo, porque el ácido que sube por el esófago destruye el esmalte de los dientes”, explica.
3. ¿El estrés contribuye a su aparición?
No hay ningún estudio que relacione el estrés con la caries –según explica en exclusiva para Plenilunia el Dr. Edelson-, pero sí con el estrés y el consumo de comida chatarra. Éstas pueden ser de diferentes tipos: las que son altas en harinas, grasa o azucar. Ahí puede haber una relación, pero que el estrés no la provoca directamente.
4. ¿Esto es diferente en las mujeres?
La boca de un niño y una niña son iguales hasta que aparecen las hormonas. “Cuando éstas llegan, empieza a haber un periodo en donde la ovulación o menstruación generan sangrado incluso en las encías. En el embarazo se pueden también inflamar, pero en la tercera edad suele ser más grave.
El tiempo y los hábitos van haciendo que ‘se bajen’ las encías, haciendo que la raíz del diente quede expuesta y propensa a un ataque de caries. Es un momento en la vida de una mujer en el que hay que ponerle especial atención a los dientes”, puntualiza el especialista.
5. ¿Cómo prevenir?
En el 99 por ciento de las personas que ingieren un alimento hay una variación en el PH. Cuando se consumen azúcares lo que sucede es que la boca se acidifica, provocando la destrucción paulatina de las estructuras dentarias.
En algunas personas, a pesar de los cuidados, se llegan a presentar: “El esmalte del diente está hecho de ‘prismitas’ que van pegados unos con otros, si están más despegados se es más propenso a la caries; pero esto no se puede ver a simple vista.
Como esto no lo podemos hacer, la recomendación de siempre sigue siendo el cepillado de los dientes tres veces al día. De hacerlo de manera estricta podemos reducir la aparición de caries en un 40 por ciento, y si controlamos los factores que se generan por la dieta, éste sería mucho mayor”, finaliza el Dr. Edelson.
6. Tecnología para neutralizar el PH
La nueva tecnología de Colgate, NeutrAzúcar, está diseñada para amortiguar la acidificación de la boca regresándola a su PH normal. Esta pasta sigue conteniendo flúor para proteger el esmalte de los dientes, pero su tecnología neutraliza el ácido 30 segundos después de cepillarnos los dientes.