En el mundo mueren casi seis millones de personas al año por uso y abuso de tabaco o enfermedades asociadas a este hábito, entre las cuales se encuentra la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).Los pacientes con tabaquismo crónico desarrollan EPOC y esta enfermedad los hace más vulnerables a padecer también enfisema pulmonar, bronquitis crónica o la combinación de dos de esos padecimientos, informa el Dr. Francisco Navarro Reynoso, director General del Hospital General de México.
Explica que la bronquitis crónica se caracteriza porque hay tos con expectoración y sensación de falta de oxígeno durante dos o tres meses seguidos y en dos años consecutivos.
En el enfisema hay destrucción pulmonar más allá de los bronquiolos terminales, es decir, al pulmón se le empiezan a hacer hoyos, las personas se encuentran cianóticas (morados de las manos), presenta opresión en el pecho al caminar, ligera tos también e insuficiencia respiratoria crónica.
El desarrollo de estos padecimientos es paulatino y variable en cada persona no obstante, a partir de los 10 años de fumar existe más probabilidad de que aparezcan.
El especialista detalla que ambas enfermedades son graves, sin embargo el desarrollo del enfisema es más lento, incluso la mayoría de los pacientes son mayores de 60 años de edad.
En este sentido dice que es frecuente que muchas personas que padecen enfisema no hayan acudido al médico aún, incluso pueden pasar hasta 20 años y se acercan a los servicios médicos cuando aparece la tos con expectoración o porque sienten disnea, lo cual retarda el diagnóstico, porque en ocasiones la enfermedad es silenciosa.
Para el control de estas enfermedades se requiere de oxígeno o broncodilatadores, comenta.
Si se diagnostica oportunamente y la persona deja de fumar hay altas posibilidades de que se estabilicen, pero el daño causado en los pulmones es irreversible.
La principal recomendación que hace el Dr. Francisco Navarro es que la gente evite fumar y quienes lo hacen intenten abandonar este hábito, para ello hay estrategias médicas para el control de esta adicción; sin embargo, para lograrlo es vital que la población verdaderamente quiera dejar de fumar, de lo contrario, se vuelve casi imposible.