Iniciativa Angels busca cambiar el paradigma de la forma en que se atiende la Enfermedad Vascular Cerebral (EVC) en el mundo, mejor conocida como infarto cerebral, proporcionando educación médica continua y herramientas que ayudan a los hospitales a estandarizar sus procesos de atención y así salvar más vidas.
[/media-credit] Los miembros del jurado describieron a la Iniciativa Angels como “un impresionante proyecto estratégico con unos objetivos bien definidos y una excelente colaboración entre una gran variedad de países y partes interesadas”, “un gran proyecto, con resultados tangibles” y un proyecto que “ha cambiado claramente la forma en que se atiende a los pacientes que sufren un ictus”.
Este esfuerzo internacional, que inició en el año 2016 con la colaboración de diversas instituciones como la European Stroke Organization (ESO), World Stroke Organization (WSO) y la Stroke Aliance for Europe (SAFE), brinda educación médica continua y herramientas que ayudan a los hospitales a estandarizar sus procesos e incrementar el número de personas con acceso a tratamiento.
Hoy, la Iniciativa Angels está presente en 41 países y ha conformado la red más grande de centros especializados (2,522) en la atención oportuna y adecuada de la EVC. México es el primero del continente americano en implementar su filosofía y metodología de trabajo con 80 hospitales enrolados y la meta es llegar a los 180 antes de finalizar el 2019.
“Para quienes colaboramos en este proyecto, el reconocimiento otorgado por la EFPIA nos indica que vamos en el camino correcto y nos motiva a seguir trabajando arduamente con instituciones de salud y la comunidad médica, ya que cada 30 minutos un paciente con EVC muere o queda discapacitado de forma permanente porque fue atendido en el hospital incorrecto o no recibió el tratamiento a tiempo”, declaró el Dr. Christian Valencia Pineda, Director Médico de la Iniciativa Angels para México y Centroamérica y El Caribe.
Destacó que en México, desde hace 2 años, están creando una comunidad de centros y hospitales, públicos y privados, que cuentan con la infraestructura humana y material necesario para atender la EVC, dentro de la cual existen los infartos cerebrales isquémicos que se producen por el bloqueo del flujo de sangre en una arteria en el cerebro debido a un trombo o coágulo; o bien, hemorrágicos, que ocurren al romperse un vaso sanguíneo en la cavidad craneal. Ambos casos se asocian con secuelas neurológicas graves e irreversibles que merman la calidad de vida de quienes lo sufren.
“En nuestro país, este padecimiento afecta a 232 adultos por cada 100 mil habitantes[1], siendo la cuarta causa de decesos y el principal motivo de discapacidad en adultos[2]. Desafortunadamente, debido al desconocimiento de la enfermedad, los pacientes no están llegando a los servicios de urgencias de las instituciones hospitalarias para que, en caso de un infarto cerebral isquémico, por ejemplo, puedan recibir la terapia de reperfusión que reduce las secuelas y evita la muerte prematura”.
Por ello, desde el 2017, la Iniciativa Angels ha entablado alianzas estratégicas con actores gubernamentales, instituciones y asociaciones médicas para enfocar sus esfuerzos en tres vías: realización de una campaña nacional que tiene por objetivo hacer que los afectados vayan al hospital dentro de una ventana de tiempo de 4.5 horas desde que aparecen los primeros síntomas; el desarrollo de una aplicación y página web (www.infartocerebral.com.mx) donde ellos o sus familiares pueden ubicar los centros que sí tienen protocolo para tratar la emergencia y, finalmente, capacitar al personal médico para garantizar la excelencia del servicio.
“A la fecha, hemos firmado convenios de colaboración con la Sociedad Mexicana de Medicina de Emergencia (SMME), la Asociación Mexicana de Enfermedad Vascular Cerebral (AMEVASC) y el Servicio de Llamadas de Emergencias 9-1-1, con el objetivo de crear una coalición multidisciplinaria que mejore la forma en que se atiende actualmente la EVC en México”, informó.
En lo que respecta a esta alianza, el directivo dijo que los resultados ya comenzaron a cuantificarse. De enero a junio de 2018, el Servicio de Llamadas de Emergencia 9-1-1 registró 606 llamadas relacionadas a casos de EVC, lo que equivale al mismo número de las recibidas bajo el rubro de accidentes vehiculares con fallecidos [3].
Finalmente, el Dr. Valencia Pineda celebró el Premio de Colaboración para la Salud 2018 otorgado por la EFPIA y agradeció a todos los profesionales que hacen posible que la Iniciativa Angels tenga resultados tangibles a tan poco tiempo de haber sido implementada en México. Sin embargo, reconoció que aún falta mucho por hacer, como lograr que las campañas tengan más impacto en la población mexicana y se incluya el tratamiento de la EVC al Catálogo Universal de Servicios de Salud, lo que permitirá reducir la carga económica y social que conlleva para los afectados y sus familias.
“Las cifras no mienten: 1 de cada 6 personas padecerá un infarto cerebral en algún momento de su vida y debemos de estar preparados. Por ello, no bajaremos la guardia para seguir trabajando en su prevención y tratamiento. Hoy, es momento de que todos sumemos voluntades y evitemos el sufrimiento futuro de muchos mexicanos por su causa”, concluyó[.]
Referencias
- Cantú-Brito C, Ruiz-Sandoval JL, Chiquete E, Arauz A, León-Jiménez C, Murillo-Bonilla LM, Villarreal-Careaga J, Barinagarrementería F, Fernández JA, Torres B, Rodríguez-Leyva I, Rangel-Guerra R.; Factores de riesgo, causas y pronóstico de los tipos de enfermedad vascular cerebral en México: Estudio RENAMEVASC, Rev Mex Neurociencias, septiembre-ocutbre de 2011; 12 (5). Disponible en: http://www.medigraphic.com/pdfs/revmexneu/rmn-2011/rmn115b.pdf
- Elsevier, Perspective on stroke in Mexico, F. Góngora Rivera, Department of Neurology and Internal Medicine at the ‘‘Dr. José Eleuterio González’’ University Hospital of the Autonomous
- Llamadas procedentes de incidentes médicos Enero-junio 2018, Disponible en: https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/350387/Estad_stica_de_Incidentes_M_dicos_registradas_en_el_9-1-1_Ene_-_Jun_2018.pdf
