Los 117 Centros de Integración Juvenil (CIJ) que hay en el país han atendido a 9 millones 500 mil personas a través de diversas actividades como talleres, terapias y pláticas de orientación, tanto a nivel personal como en escuelas de educación básica y centros laborales.
En conferencia de prensa, la directora general de los CIJ, Carmen Fernández Cáceres, señaló que con estas acciones se reduce la posibilidad de que los niños y adolescentes consuman drogas. Anualmente, abundó, los CIJ reciben alrededor de 100 mil nuevos casos, la mitad de ellos son personas con problemas de adicción, y la otra parte son familiares. Refirió que el 98% de los jóvenes internados, se rehabilitan y el 10% llega a presentar alguna recaída durante el primer año.Dentro de los programas preventivos, agregó, participan alrededor de 8 mil personas voluntarias en diferentes actividades como enviar mensajes informativos de los efectos del consumo a través de las redes sociales.
Consideró fundamental la participación de los padres de familia en la prevención y rehabilitación de sus hijos. Se les enseña a detectar alguna señal de riesgo que implique que los jóvenes consumen alguna droga, como cambios en la conducta que, por lo regular, son imperceptibles.
Testimonios
Alma, de 27 años de edad, quien desde hace 3 años no consume drogas, informó que a los 12 años de edad comenzó ingiriendo alcohol. Sin embargo, 5 años antes de ingresar al CIJ, tuvo una microembolia cerebral que le ocasionó pérdida de movimiento en el 5% de su cuerpo, debido al consumo de crack.
Guadalupe, otra ex paciente de los CIJ, indicó que la participación de la familia es fundamental en la rehabilitación de las personas que tienen alguna adicción, ya que trabajan junto con los terapeutas de estos centros en rescatarlos. “Cuando uno es consumidor se pierde la capacidad de pensar y no pedimos ayuda”.
En su oportunidad, Miguel Ángel Fuentes, encargado de proporcionar las farmacoterapias en el CIJ Cuajimalpa, destacó que la información difundida en redes sociales tiene un impacto importante, ya que se difunden hasta imágenes de las consecuencias del uso de alguna droga.
En su mensaje, Arely, otra de las voluntarias, invitó a los jóvenes a unirse a estos grupos de trabajo para promover una población sana y tener un desarrollo pleno.