Sí, por diversas razones las relaciones sexuales satisfactorias contribuyen a la buena salud. Sus efectos pueden ser múltiples pero, por supuesto, si están acompañados de una buena alimentación, una rutina cotidiana de ejercicio y una vida sana, los resultados serán aún más notorios.
Cuando se tienen relaciones sexuales con una pareja a la que se quiere, con la que hay intimidad y cercanía, el vínculo es positivo y la relación es satisfactoria, la actividad sexual puede tener muchos beneficios.
Cada momento de la intimidad estimula de diferentes formas a nuestro organismo haciéndonos sentir más contentas, deseadas, vitales, rejuvenecidas y energéticas. ¿Energéticas? Sí, dicen los taoístas que la energía sexual es una energía de vida que somos capaces de incrementar con la estimulación adecuada y que potenciamos y compartimos con la pareja durante el contacto sexual. Pero no sólo el de los genitales; las miradas, el contacto de las manos y cada centímetro de piel, despierta esa energía que nos provoca sensaciones muy intensas en el momento y, que también nos beneficia después.
No sólo los taoístas han notado los beneficios de la actividad sexual satisfactoria. Los científicos también han notado las repercusiones de la respuesta sexual en la salud.
Para empezar, durante la actividad sexual se producen sustancias químicas (dopaminas y serotonina) que relajan, disminuyen la ansiedad y dejan una sensación de bienestar. Al disminuir el estrés y la tensión, se mejora el sueño y se descansa mejor. Las caricias en toda la piel, estimulan el sistema nervioso y ayudan a relajar los músculos.
Por otro lado, con la excitación sexual se acelera el ritmo cardíaco y aumenta la irrigación sanguínea, lo que da como resultado una mejor circulación y un corazón ejercitado. El ritmo de la respiración también se acelera y, con ello, se regenera y oxigena mejor la sangre.
Las reacciones provocadas por la respuesta sexual también ayudan a equilibrar el funcionamiento de la tiroides y fortalecer el sistema inmunológico, con lo que corremos menos riesgo de infecciones tales como la gripa.
El placer sexual desencadena una mayor producción de estrógenos que hacen que la piel esté más elástica e hidratada y, como los estrógenos influyen en la memoria, ésta también se ve beneficiada.
Y, por si fuera poco, las contracciones involuntarias que se dan en el momento del orgasmo mueven los músculos del abdomen y ayudan a tener una mejor digestión, al tiempo que se queman calorías, unas 200 en promedio.
Sentirse querida, deseada y aceptada influye directamente en la autoestima y estado de ánimo, lo que nos hace vernos y sentirnos maravillosamente bien. Y como se trata de disfrutar, compartir y cuidar la salud, prevenir infecciones de transmisión sexual es un punto que siempre hay que recordar.
El sexo aleja a los infartos
Según un estudio publicado en el Journal of Epidemiology and Community Health, tener relaciones sexuales muy frecuentes, no aumenta el riesgo de sufrir un paro cardíaco a los hombres de mediana edad y, de hecho, contribuye a prevenir que los infartos tengan consecuencias fatales.
En este estudio realizado en la Universidad de Bristol, con 3 mil hombres de 45 a 59 años de edad, se pudo observar que si bien el hecho de tener relaciones sexuales con más frecuencia no disminuye el riesgo de infarto, tampoco lo aumenta. Así que si no quita el riesgo del todo, por lo menos, si las disfrutan, seguramente los hará sentirse mejor.
Según los investigadores, la asociación entre la actividad sexual y los infartos se debe a que este tipo de problemas cardiacos suelen presentarse en la mañana o en la noche, que son los mismos momentos del día en que las personas acostumbran tener relaciones sexuales con más frecuencia. Así que parece ser más una cuestión de coincidencia de horario que de causa-efecto.
Si bien durante la actividad sexual el corazón late más rápido, bombea más sangre y, por lo tanto se esfuerza más, si los hombres tienen relaciones sexuales con cierta frecuencia y, además hacen ejercicio con regularidad, lejos de perjudicarles el corazón podría beneficiarles.
Cascada de bienestar
La actividad sexual satisfactoria brinda múltiples beneficios para la salud.
-Relaja, disminuye la ansiedad y deja una sensación de bienestar.
-Disminuye el estrés y la tensión; mejora el sueño y se descansa mejor.
-Estimula el sistema nervioso y ayuda a relajar los músculos.
-Acelera el ritmo cardíaco, aumenta la irrigación sanguínea, mejora la circulación y ejercita el corazón.
-Activa la respiración, oxigena mejor la sangre.
-Ayuda a equilibrar el funcionamiento de la tiroides y fortalece el sistema inmunológico.
-Beneficia a la memoria.
-Mejora la digestión.
-Quemamos calorías.