Cuida tu salud

Es muy común que dejemos a un lado la mayoría de nuestras necesidades porque damos prioridad a otras cosas que no podemos postergar. Cómo mamás de tiempo completo, es difícil disponer de algunos momentos para nuestro cuidado personal. Pero no todo está perdido, aun con nuestra agenda llena de pendientes podemos ingeniárnoslas para tomar algunos minutos de aquí y de allá y aprovecharlos en nuestro bienestar.

Durante el baño diario, por ejemplo, podemos alternar cada semana el jabón para humectar y exfoliar nuestra piel, así como cambiar frecuentemente de champú y acondicionador para que el cabello no guarde residuos y mantenerlo saludable. Cuidar nuestra piel es muy importante, así que no olvidemos aplicar diariamente generosas porciones de crema. Para cara y cuello podemos utilizar cremas antiarrugas (las que contienen jalea real son muy buenas) y, para el cuerpo, las “anticelulitis” con algas marinas son una buena opción.

Procuremos una alimentación balanceada con poca grasa y azúcar. Para la oficina es buena idea preparémonos un lunch, así evitaremos tener que “garnachear” y despreocuparnos por la acumulación de grasa en el cuerpo.

Además, asegurémonos de hacer ejercicio regularmente, usemos escaleras en vez de elevador y, si podemos, mantengámonos constantemente en movimiento porque tantas horas sentadas en la oficina o en el auto, no dejan nada bueno.

Les aseguro que teniendo un cuerpo saludable y en forma, hará que nos cambie hasta el humor, sin mencionar los beneficios que se reflejan en la piel, el peso o la digestión.

¡Ánimo mamás! Si somos capaces de maniobrar con tareas, cocina, limpieza de casa, escuela, tránsito, proyectos laborales y una relación sentimental, seguramente podemos dedicarnos unos minutos diarios para el cuidado personal y, desde luego, el bienestar emocional ¿no creen?